Los responsables de las grandes carpas cerveceras de la Oktoberfest de Múnich han prohibido a los reporteros de prensa fotografiar a borrachos y mujeres con los pechos al aire, por entender que daña la imagen de la mayor fiesta popular del mundo y vulnera la privacidad de los asistentes.
Los profesionales de los medios deberán declarar por escrito que no tomarán tales fotografías al recibir su acreditación, indicaron hoy fuentes de las cerveceras que participan en la fiesta, que se inaugura en la capital bávara este sábado.
"Tomar fotografías de personas bajo la influencia del alcohol o medio desnudos queda prohibido", estipularon los responsables de esos recintos, ya que se considera que con ello se atenta contra el "derecho a la intimidad, contra la decencia y contra la protección de los menores".
La Asociación de Periodistas de Baviera criticó la medida, por entender que se trata de una censura e impide dar una imagen global de la fiesta.
Los organizadores, en cambio, alegan que tales fotografías dan una impresión distorsionada de la Oktoberfest, ya que se centran en unos individuos concretos y no en el ambiente festivo del conjunto.
Para evitar que ello ocurra, los fotógrafos profesionales estarán acompañados en los recintos por personal de seguridad de las carpas o de las propias cerveceras.
La 176 edición de la fiesta de la cerveza muniquesa se abrirá este sábado y prevé concentrar entre sus atracciones al aire libre y las carpas a unos seis millones de visitantes, que de acuerdo a la tradición consumirán una media de un litro de cerveza por persona.
La Oktoberfest se cerrará el 4 de octubre y, a lo largo de sus dos semanas de duración, recibirá a visitantes de todo el mundo, atraídos por una fiesta considerada la quintaesencia de la jovialidad bávara.
Fuente: EFE