Llega el verano, la costanera de la ciudad se prepara para recibir a los bañistas y con las altas temperaturas se enciende el ingenio rosarino. Un curioso cartel advierte que está "prohibido pezcar" y arranca más risas que temores a los que buscan en la playa local un momento de esparcimiento.

No, no se trata de un juego de palabras (pez-car) sino de una notable falta de ortografía. "Atención respete. Prohibido pezcar", dice el mensaje y está acompañado de la imagen de una caña que se hunde en las aguas del Paraná.

El mensaje no falla, en la playa no se vio a nadie encarnar su anzuelo en este comienzo de la temporada, pero muchos son los que detectaron el error.