El diputado provincial Eduardo Toniolli criticó al juez de instrucción de Reconquista, Virgilio Palud, quien procesó a tres policías de una comisaría del norte de la provincia pero no por “torturas” sino por “apremios ilegales”, una imputación menor.

El presidente de la Comisión de Derechos y Garantías de la Cámara de Diputados señaló su alarma por el hecho de que "para Palud tormentos como la picana y el submarino seco merezcan la carátula ´apremios ilegales´".

El juez de instrucción de Reconquista procesó a los tres policías de Florencia, en el noreste de Santa Fe, acusados de torturar a tres jóvenes y a dos trabajadores rurales.

Toniolli había denunciado estos hechos ante la corte Suprema de Justicia de la provincia, con el patrocinio del Defensor General Gabriel Ganón, y manifestó que "la figura a través de la que los procesó es la de ´apremios ilegales´, que no se condice con el tenor de los hechos referenciados en los testimonios: uso de picana y submarino seco".

“La diferencia -continuó- es simple: el código penal establece de 1 a 5 años de prisión por apremios, en cambio, por torturas, de 8 a 25 años. Producto de ello, además, los procesados pueden seguir el juicio en libertad".

Al ser consultado por el papel del magistrado, Toniolli expresó que "evidentemente la presión social y política ha generado que Palud tuviera que ´hacer algo´, aunque no lo que debía hacer", y agregó, "a esto se le suman las requisitorias enviadas por la ´Relatoria contra la tortura´ de la ONU al Estado Nacional, que desembocaron en pedidos de informes de la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación a la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe y al Ejecutivo Provincial, en base al pedido a ese organismo que realizamos en su momento con Ganón, que al parecer molestó a algunos sectores del poder judicial".

Por último el diputado del Movimiento Evita le solicitó al Ministro de Seguridad Raúl Lamberto que se avance en los trámites administrativos a fin de "exonerar a los agentes procesados".