La interventora del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados (INSSJP), Graciela Ocaña, relevó de su cargo al titular del Pami II de Rosario, Ricardo Oyola y al médico de ese policlínico Antonio Ludvik, tras investigar las denuncias de que recibían dinero de un laboratorio para usar sin el consentimiento de los pacientes drogas no autorizadas.

La medida, que surge de una investigación del periodista Andrés Kliphhan de Canal 9 de Buenos Aires, fue confirmada este viernes a la noche por voceros del Pami. "Me sentía muy mal, con dolores en la barriga", aseguró una de las abuelas afectadas a Telenueve. "Nunca me dijeron que era experimental", agregó otra anciana.

El uso de medicamentos no autorizados en pacientes de ese policlínico se denunció en noviembre de 2005, cuando ese medio porteño mostró que los ensayos clínicos que realizaban estos médicos eran ilegales, ya que no tenían la autorización de los pacientes para someterse al tratamiento.

Los abuelos eran tratados como conejitos de Indias, ya que en ellos se testeaban fármacos aún no aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Medica (Anmat). Los médicos recibían, según el informe, dinero de las corporaciones financieras

El sumario interno está bajo la Unidad Fiscal para la Investigación de los delitos cometidos en el ámbito de actuación de la obra social, que conduce el fiscal Carlos Stornelli. Por lo pronto, Ocaña relevó al director del policlínico, Ricardo Oyola, y al médico Antonio Ludvik, y ninguno de ellos podría ejercer más la medicina.