Los fieles de la Iglesia Pentecostal “Abrigo del altísimo” de Granadero Baigorria enfrentaron un doble golpe por un robo que además de la pérdida de materiales significó una ofensa a su templo.

Delincuentes ingresaron, robaron equipos de audio y electrónica, provocaron destrozos e incluso defecaron en la cocina del lugar.

Según señaló el pastor Rodrigo a De 12 a 14 (El Tres), el hecho ocurrió entre el miércoles a la noche y el jueves a la madrugada. “Es la primera vez que ingresaron a nuestra iglesia y se llevaron micrófonos, cables, televisores; materiales para la alabanza y para la música”, expresó.

Los delincuentes entraron al lugar a oscuras y dejaron rastros de haber utilizado una vela. “Había más elementos que no se llevaron. Rompieron la reja y pasaron por un espacio no muy grande”, contó el religioso.

En el medio del hurto, los ladrones defecaron en la cocina. “Los hermanos quedaron un poco dolidos por esa situación no agradable”, afirmó el pastor, quien agradeció a la comunidad que se organizó para reactivar la actividad y reforzar la seguridad de la iglesia.