El piloto alemán Michael Schumacher se mostró más que optimista con su regreso a la Fórmula 1 con Mercedes, el año que viene, y ya habla de su octavo título del mundo.

"Todos confían en mí y yo más que nadie”, expresó. Sin embargo, dijo que lograr el octavo campeonato “no será fácil” y que si no lo logra no le afectará.

Pese a ello, Schumacher aseguró no hacerse problemas por esto, ya que su currículum de mejor piloto de la historia de la Fórmula 1 con siete títulos en su haber pueda resultar afectado.

"No importa lo que suceda, porque veo todo positivo. Si las cosas fueran de otro modo al esperado, también habrá que aceptarlo", afirmó hoy Schumacher ante las cámaras de la emisora televisiva alemana RTL.

"Todos confían en mí y yo más que nadie. Y eso es precisamente lo que hago en este momento", agregó, en declaraciones que también reprodujo la agencia de noticias DPA.

Al piloto más famoso de Alemania, que el 14 de marzo correrá su Grand Prix número 251, se lo vio rebosante de energía tras tres años sin correr en la primera clase del automovilismo mundial.

El trabajo conjunto con el jefe del equipo Ross Brawn y el nuevo team Mercedes para el que correrá durante los próximos tres años, es para él "como un volver a vivir".

Su compañero de equipo será el también alemán Nico Rosberg, "así que todo quedará entre amigos", bromeó Schumi.

"Ya vimos esta temporada lo ajustadas que son las carreras. Por eso hay que entrar a pelear con todo. Y ese es exactamente el tipo de desafío que busco, que me inspira y me pone en mi mejor estado", completó el alemán, que a punto de cumplir 41 años en enero próximo, es consciente de que deberá vérselas con rivales que son, en varios casos, hasta 20 años más jóvenes que él.

Schumacher se retiró en 2006 tras correr su carrera número 250 en San Pablo, Brasil, con el extraordinario balance de 91 Grand Prix ganados y 7 títulos mundiales, los que lo convirtieron en el corredor más exitoso de la historia de la Fórmula 1, superando los 5 campeonatos del argentino Juan Manuel Fangio.