El Concejo Municipal aprobó este jueves la instalación de radares preventivos que midan la velocidad de cada conductor en avenidas y bulevares de la ciudad, y también informen sobre la máxima permitida en esa traza, con el objetivo de crear conciencia y prevenir accidentes.
La iniciativa, del edil del Partido Demócrata Progresista (PDP) Aldo Pedro Poy, plantea que se coloquen los dispositivos con una “finalidad informativa” en “lugares estratégicos de Rosario”, buscando que disminuyan su marcha en caso que corresponda.
El texto deja en claro que los nuevos radares “no podrán instalarse con fines recaudatorios ni sancionatorios, ni establecer penas de ningún tipo a los conductores que sean advertidos por exceso de velocidad”.
La propuesta de Poy surge de la idea de que “es necesario implementar medidas que tiendan a lograr una mejor conducta vial en los automovilistas que circulan por avenidas y bulevares de nuestra ciudad”.
De acuerdo al proyecto, los aparatos medidores funcionarán “de forma automática las 24 horas”, por lo que “no requieren la presencia de un agente de tránsito ni un equipamiento especial móvil que deba ponerse en práctica” especialmente.
Además, se compondrán de dos carteles: uno con la velocidad máxima permitida en ese lugar (arriba) y otro, digital, con la que registrada a cada vehículo.
Bicicletas accesibles con préstamos del Municipal
Otra propuesta de Poy aprobada por el Concejo impulsa la creación de del “Programa de Bicicletas Accesibles con Financiamiento”, para la adquisición de rodados a través del Banco Municipal, “quien deberá adoptar las medidas necesarias para establecer líneas de créditos destinados a tal fin”.
La idea fue presentada en el marco del avance del sistema de bicisendas, que suma kilómetros en diferentes zonas de la ciudad acompañado de una política oficial para fomentar ese medio de transporte alternativo, económico, ecológico y ágil.
Se pretende que los préstamos del Municipal sean “de una cuota mensual que no podrá superar el costo de dos viajes diarios del Transporte Urbano de Pasajeros (biviaje), multiplicada por treinta días”.
Para policías que no saben manejar
Luego de los dichos del secretario de Seguridad Comunitaria, Ángel Ruani, sobre la existencia de muchos policías santafesinos sin carnets de conducir, se aprobó el proyecto del concejal Jorge Boasso para que se brinde capacitación y entrenamiento al personal de la Unidad Regional II que no cuente con esas licencias, a los fines de que puedan tramitar las mismas.
La iniciativa establece que la capacitación se realice de manera gratuita y en horarios que no afecten el normal desarrollo de las funciones policiales.
Semanas atrás, Ruani había advertido públicamente que hay móviles parados y que una gran cantidad de efectivos están destinados a cumplir tareas administrativas debido a que no saben manejar o no cuentan con el carnet habilitante.
“Es necesario tener mayor presencia policial en las calles, es un despropósito que existan vehículos policiales parados porque los agentes no poseen conocimientos ni licencia para conducir”, consideró Boasso.