Una pareja será indemnizada por no poder volar juntos en su luna de miel. En la sentencia judicial, se detalla además que los hoteles que les habían reservado presentaban malas condiciones higiénicas. Lo que se dice, un viaje al infierno.

La Audiencia de Barcelona ha condenado a una agencia turística y a su mayorista a indemnizar con 1.797 euros a una pareja por haberla hospedado en hoteles en malas condiciones higiénicas en su viaje de luna de miel a Canadá y haberles programado el regreso en vuelos separados.

Según mantiene el fallo, tres de los seis hoteles que la pareja había contratado para su viaje a Canadá se encontraban en malas condiciones. El primero de ellos, en Québec, no tenía ventilación, pero los viajeros no pudieron mudarse a otro porque todos estaban completos.

El Hotel Capital Hill de Ottawa, donde los novios debían dormir otros cuatro días, también presentaba falta de higiene, mientras que en el tercer establecimiento en que se hospedaron les asignaron una habitación muy reducida, con arañas y una cama cuyas sábanas tenían quemaduras.

Además, los novios tuvieron que comprar otro billete de avión para regresar juntos a Barcelona, ya que la agencia de viajes les había reservado el regreso en dos vuelos distintos.