Siamesas bengalíes fueron separadas tras una maratoniana operación que duró más de 27 horas en Australia. Ahora, están despiertas y los médicos anunciaron que son optimistas sobre su recuperación.

Krishna y Trishna, de dos años y 11 meses, estaban unidas por la parte superior de la cabeza. En la actualidad, se encuentran en buen estado y Trishna incluso ya habla, indicó la neurocirujana Wirginia Maixner.

Trishna se despertó ayer, un día antes que su hermana Krisha, a la que los doctores sacaron esta mañana del coma inducido al que ambas fueron sometidas con motivo de la intervención.

Tras examinar los cerebros de ambas, los médicos han concluido que no han sufrido daños por la operación que se les practicó el martes en el Royal Childrens Hospital de la ciudad australiana de Melburne.

Krishna y Trisha proceden de la empobrecida Bangladesh y su madre las internó en un orfanato de Dacca poco después de su nacimiento en 2006.

Dos voluntarias australianas, Danielle Noble y Natalie Silcock, se encargaron de recaudar fondos para traer a las niñas a Melburne, adonde llegaron en el 2007, gracias a una organización caritativa local.

A partir de entonces pasaron en varias ocasiones por el quirófano para separar los vasos sanguíneos que unían sus cerebros.

Sin la intervención del martes, no habrían vivido más de un año, mientras había un 25 por ciento de posibilidades de que hubieran muerto durante o después de la operación y un 50 por ciento de que sufrieran daños cerebrales, según los doctores.

Fuente: EFE