El cuerpo médico que atiende a unas
siamesas nacidas en Montevideo con un corazón duplicado y unidas por pecho y abdomen dijo que no pueden ser operadas.
En rueda de prensa la doctora Estela Concelo señaló que si bien las niñas tienen dos corazones, los mismos están mal formados y uno depende del otro, lo que impide la intervención médica.
En un principio y, antes del nacimiento, 48 horas atrás, a nivel médico se sostenía que compartían un mismo corazón, pero tras la profundización de los estudios se explicó que no es así, que tienen dos corazones, pero interrelacionados.
Los órganos presentan cardiopatías complejas y comparten funciones, según explicó la doctora Concelo, quien añadió que este "embarazo gemelar siamés toracópago", del que hay muy pocos antecedentes a nivel mundial, se comenzó a percibir a las 24 semanas de gestación.
Explicó que el equipo médico había hecho múltiples consultas con prestigiosos cardiólogos y ecocardiográficamente parecía que era un solo corazón, pero tras nacer se comprobaron que si bien son dos, están unidos y cada uno es dependiente del otro.
"Esto hace que sea imposible pensar en la separación", informó, por su parte, el doctor neonatólogo Daniel Borbonet.
Las siamesas permanecen estables, pero el cuerpo médico no prevé la posibilidad de intentar separarlas, señalaron los galenos.
La directora del hospital universitario donde están ingresadas las siamesas, Graciela Ubach, quien asistió al encuentro con la prensa junto con el padre de las niñas, Víctor Rivero, señaló que la madre estaba al tanto de la gravedad de su embarazo pero que decidió no interrumpirlo.
Por momentos la conferencia se puso tensa cuando el padre de las siamesas Jessica y Victoria Rivero acusó a un canal de televisión de violar su intimidad.
Rivero ratificó que la continuación del embarazo fue una decisión suya y de su esposa, y que "si venía como venía" lo iban a afrontar, al tiempo que se mostró molesto por los comentarios a la decisión de no interrumpir el embarazo.
Por su parte, el neonatólogo Borbonet afirmó que "en ningún momento se planteó que fuera un sólo corazón (...). Son dos corazones unidos, comparten algunas cavidades como la auricular y la pared muscular de los ventrículos que están unidos (y que) tienen mal formaciones severas".
El médico dijo que se hicieron consultas a especialistas extranjeros antes del nacimiento y que no se descarta que se sigan haciendo.
No es "separar y nada más", precisó el profesional, porque tampoco hay antecedentes a nivel internacional de uniones como ésta, que comprometen el tórax y el abdomen y que hayan podido ser separadas preservando las vidas de los bebés, concluyó el médico.
En rueda de prensa la doctora Estela Concelo señaló que si bien las niñas tienen dos corazones, los mismos están mal formados y uno depende del otro, lo que impide la intervención médica.
En un principio y, antes del nacimiento, 48 horas atrás, a nivel médico se sostenía que compartían un mismo corazón, pero tras la profundización de los estudios se explicó que no es así, que tienen dos corazones, pero interrelacionados.
Los órganos presentan cardiopatías complejas y comparten funciones, según explicó la doctora Concelo, quien añadió que este "embarazo gemelar siamés toracópago", del que hay muy pocos antecedentes a nivel mundial, se comenzó a percibir a las 24 semanas de gestación.
Explicó que el equipo médico había hecho múltiples consultas con prestigiosos cardiólogos y ecocardiográficamente parecía que era un solo corazón, pero tras nacer se comprobaron que si bien son dos, están unidos y cada uno es dependiente del otro.
"Esto hace que sea imposible pensar en la separación", informó, por su parte, el doctor neonatólogo Daniel Borbonet.
Las siamesas permanecen estables, pero el cuerpo médico no prevé la posibilidad de intentar separarlas, señalaron los galenos.
La directora del hospital universitario donde están ingresadas las siamesas, Graciela Ubach, quien asistió al encuentro con la prensa junto con el padre de las niñas, Víctor Rivero, señaló que la madre estaba al tanto de la gravedad de su embarazo pero que decidió no interrumpirlo.
Por momentos la conferencia se puso tensa cuando el padre de las siamesas Jessica y Victoria Rivero acusó a un canal de televisión de violar su intimidad.
Rivero ratificó que la continuación del embarazo fue una decisión suya y de su esposa, y que "si venía como venía" lo iban a afrontar, al tiempo que se mostró molesto por los comentarios a la decisión de no interrumpir el embarazo.
Por su parte, el neonatólogo Borbonet afirmó que "en ningún momento se planteó que fuera un sólo corazón (...). Son dos corazones unidos, comparten algunas cavidades como la auricular y la pared muscular de los ventrículos que están unidos (y que) tienen mal formaciones severas".
El médico dijo que se hicieron consultas a especialistas extranjeros antes del nacimiento y que no se descarta que se sigan haciendo.
No es "separar y nada más", precisó el profesional, porque tampoco hay antecedentes a nivel internacional de uniones como ésta, que comprometen el tórax y el abdomen y que hayan podido ser separadas preservando las vidas de los bebés, concluyó el médico.