Las autoridades brasileñas atribuyeron al viagra y a los nuevos remedios contra la impotencia el significativo aumento del contagio del sida entre los mayores de 50 años, constatado en el último boletín sobre el avance de la enfermedad, informó hoy la prensa.
En declaraciones publicadas hoy por el diario "O Globo", la directora del Programa Nacional de Combate al Sida, Mariángela Simao, dijo que los remedios contra la impotencia masculina intensificaron la vida sexual de la población de más edad y aumentaron su vulnerabilidad a la enfermedad.
Según el Boletín Epidemiológico sobre el sida divulgado el martes por el Gobierno, la tasa de incidencia de la enfermedad entre hombres de entre 50 y 59 años pasó de 18,2 casos para cada 100.000 personas con esa edad en 1996, a 29,8 casos el año pasado.
De la misma forma, la incidencia de la enfermedad entre los mayores de 60 años subió de 5,9 casos para cada 100.000 personas con esa edad en 1996, a 8,8 casos en 2005.
El aumento de contagios de sida entre los hombres de mayor edad y su mayor actividad sexual también afectó a sus compañeras. El número de casos de sida entre mujeres de entre 50 y 59 años pasó de 6 por cada 100.000 habitantes en 1996, a 17,3 por 100.000 habitantes el año pasado.
Entre las mayores de 60 años el aumento fue de 1,7 por 100.000 habitantes en 1996, a 4,6 en 2005.
Según Simao, la generación que utiliza actualmente los nuevos remedios contra la impotencia es más vulnerable a contraer la enfermedad debido a que inició su vida sexual en una época en que no se conocía nada sobre el sida ni se hacían campañas para promover el uso de preservativos.
"Cuanto más viejos son, menos usan preservativos", afirmó la funcionaria.
En declaraciones publicadas hoy por el diario "O Globo", la directora del Programa Nacional de Combate al Sida, Mariángela Simao, dijo que los remedios contra la impotencia masculina intensificaron la vida sexual de la población de más edad y aumentaron su vulnerabilidad a la enfermedad.
Según el Boletín Epidemiológico sobre el sida divulgado el martes por el Gobierno, la tasa de incidencia de la enfermedad entre hombres de entre 50 y 59 años pasó de 18,2 casos para cada 100.000 personas con esa edad en 1996, a 29,8 casos el año pasado.
De la misma forma, la incidencia de la enfermedad entre los mayores de 60 años subió de 5,9 casos para cada 100.000 personas con esa edad en 1996, a 8,8 casos en 2005.
El aumento de contagios de sida entre los hombres de mayor edad y su mayor actividad sexual también afectó a sus compañeras. El número de casos de sida entre mujeres de entre 50 y 59 años pasó de 6 por cada 100.000 habitantes en 1996, a 17,3 por 100.000 habitantes el año pasado.
Entre las mayores de 60 años el aumento fue de 1,7 por 100.000 habitantes en 1996, a 4,6 en 2005.
Según Simao, la generación que utiliza actualmente los nuevos remedios contra la impotencia es más vulnerable a contraer la enfermedad debido a que inició su vida sexual en una época en que no se conocía nada sobre el sida ni se hacían campañas para promover el uso de preservativos.
"Cuanto más viejos son, menos usan preservativos", afirmó la funcionaria.
