El síndrome de fatiga crónica es una enfermedad incapacitante que provoca un agotamiento extremo, tanto físico como mental. En algunos casos incluso hasta darse una ducha puede suponer un esfuerzo titánico.

Hasta ahora poco se sabía acerca de la procedencia de este síndrome, pero un estudio realizado por un equipo de King´s College de Londres descubrió una de sus posibles causas. De acuerdo a esta investigación británica, esto tendría que ver con un sistema inmune hiperactivo y desbocado.

Los investigadores observaron que un grupo de pacientes a los que se les suministraban medicamentos para estimular a su organismo a combatir la hepatitis C, acababan desarrollando síntomas muy similares a los de las personas que sufren síndrome de fatiga crónica, según consignó The Thelegraph.

Incluso antes de recibir dicho tratamiento, esos pacientes mostraban altos niveles de los biomarcadores asociados con la inflamación, lo que daba cuenta de que su sistema inmune ya había sido estimulado para dar una respuesta muy intensa.

Ahora los médicos ya saben que las personas que muestran una respuesta más activa de lo habitual de su sistema inmune, pueden ser más propensas a acabar desarrollando el síndrome de la fatiga crónica. A partir de este hallazgo, es posible empezar a avanzar en una solución.