El líder de jubilados y desempleados, Raúl Castells encabezó este viernes a la mañana una movilización por el centro de Rosario en repudio de los dichos del ex candidato por el Pro a concejal de Gálvez, Julio Fornari, quien instó a "quemar" las villas y trató de "ratas" a sus habitantes. Pero la manifestación se realizaba en forma tranquila y "sin armas", pese a las polémicas declaraciones de Castells que alertó sobre la posibilidad de un enfrentamiento civil “porque en cada casa de los barrios pobres hay un arma".
En contacto con Radio 2, el referente del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), analizó los dichos que ayer lo pusieron en el centro del debate. Declaraciones que generaron, incluso, que intervieniera en el tema el fiscal rosarino Esteban Franicevich para asegurarse de que no se generaran incidentes.
“En todos los barrios hay un arma en cada casa. Los 275 mil jóvenes de entre 14 y 29 años de Rosario ya sufren el castigo de no tener acceso al estudio, al trabajo y encima los tratan como ratas, eso genera un odio profundo”, abundó el dirigente.
Lejos hacer insinuaciones sobre enfrentamientos, esta vez Castells llamó a la conciliación: “Proponemos que el jueves próximo, a las 16, nos reunamos en Empalme Granero, que venga la gente del centro y de las villas” y observó: “Hay que mejorar la seguridad para todos, hay que respetar y generar otras conductas”.
Mientras hablaba, según advirtió el periodista de radio 2 Ariel Borderi, el dirigente tenía en sus manos la denuncia a la fiscalía de turno que presentó contra las declaraciones emitidas el miércoles por el entonces candidato en Gálvez a ocupar una banca en el Concejo.
