La restricción energética sigue y podría profundizarse. Este lunes se cumple la medida pautada por el gobierno de de ahorro de luz de ocho horas diarias para las grandes industrias del país que consumen más de 300 megavatios.

Desde el viernes, la medida de control de uso de energía que se extendía de 18 a 23, pasó a ocupar la franja horaria de 16 a 24, con lo que se espera esas empresas reduzcan 1.200 megavatios diarios. La decisión oficial se basó en la ola polar pronosticada para esta semana y podría ampliarse a las 24 horas a partir de mañana martes, si continúan las bajas temperaturas.

En Rosario, la resolución fue puesta en práctica de manera espontánea y despareja también por los grandes comercios (tiendas y shoppings) que optaron en algunos casos por trabajar a media luz durante todo el fin de semana y en otros por apagar las luces de los comercios durante algunos minutos.

Esta última modalidad fue adoptada por uno de los shoppings de la ciudad que, tanto el sábado como el domingo, además de trabajar con iluminación reducida en los espacios comunes, ordenó a los dueños de los locales apagar la totalidad de las luces durante 10 minutos entre las 15.50 y las 16.

Por los altavoces se anticipaba a los clientes que paseaban inadvertidos que minutos más tarde se cortaría la luz como una forma de colaborar con el plan de restricción energética aplicado por la Empresa Provincial de la Energía (EPE). Esa firma estatal aplicará multas que ascenderían a tres mil pesos por cada kw de exceso a las industrias que no cumplan con la disposición oficial.

La medida que comprende también a countries y grandes edificios corporativos fue tomada por la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa), a través de la resolución 1281, la cual indica que los grandes usuarios con consumos que superan los 300 megavatios deben reducir la demanda en los horarios mencionados, con el fin de hacer frente a los problemas energéticos, y equipararla a la que tuvieron en el 2005.

Cammesa reiteró además, que si la situación empeora, se prevén medidas aún más estrictas como el corte en luminarias públicas, la prohibición de que se realicen espectáculos deportivos nocturnos y la exigencia de que se mantengan apagadas las vidrieras en horas de la noche, tal como exigen los industriales.