El temor y la preocupación se apoderó otra vez de toda Nueva York en la tarde de este miércoles, cuando una fuerte explosión, presuntamente causada por el incendio de un transformador, se produjo en un edificio en el Midtown Manhattan, en pleno corazón de la ciudad estadounidense.
El estallido hizo que se derrumbara al menos parte de la torre afectada, por lo que se temía que haya quedado gente atrapada bajo los escombros. En el lugar sólo trabajan bomberos para sofocar las llamas.
Las autoridades procuraban determinar el origen del hecho, aunque los primeros reportes no asociaban al caso con un atentado terrorista. No se incluyeron informes sobre víctimas mortales o heridos y se aseguró que se trató de un estallido en una tubería de vapor o en un transformador del edificio.
La explosión, que ocasionó una densa columna de humo, hizo que la policía corte el centro de la ciudad al tránsito vehicular, se produjo en la calle 41 de Manhattan, muy cerca de la estación Central de trenes, que fue evacuada aunque los subtes continuaban funcionando con normalidad.
Los neoyorquinos, traumatizados tras los atentados que el 11 de septiembre de 2001 derrumbaron las Torres Gemelas, siguieron con ansiedad las noticias emitidas por la radio y la televisión, en momentos en que el gobierno asegura que la posibilidad de un nuevo ataque terrorista en el país está latente.
Mucha gente se reunió también en el lugar a observar con preocupación la escena, dominada por humo, polvo y sirenas, que trajo los peores recuerdos.
Tras la explosión, varios edificios de oficinas fueron evacuados por las autoridades y la zona cercana al cruce de la Quinta Avenida y la calle 41 se llenó de ambulancias
El hecho se produjo en una hora pico de movimiento en una zona que de por sí es muy transitada todo el día.
El estallido hizo que se derrumbara al menos parte de la torre afectada, por lo que se temía que haya quedado gente atrapada bajo los escombros. En el lugar sólo trabajan bomberos para sofocar las llamas.
Las autoridades procuraban determinar el origen del hecho, aunque los primeros reportes no asociaban al caso con un atentado terrorista. No se incluyeron informes sobre víctimas mortales o heridos y se aseguró que se trató de un estallido en una tubería de vapor o en un transformador del edificio.
La explosión, que ocasionó una densa columna de humo, hizo que la policía corte el centro de la ciudad al tránsito vehicular, se produjo en la calle 41 de Manhattan, muy cerca de la estación Central de trenes, que fue evacuada aunque los subtes continuaban funcionando con normalidad.
Los neoyorquinos, traumatizados tras los atentados que el 11 de septiembre de 2001 derrumbaron las Torres Gemelas, siguieron con ansiedad las noticias emitidas por la radio y la televisión, en momentos en que el gobierno asegura que la posibilidad de un nuevo ataque terrorista en el país está latente.
Mucha gente se reunió también en el lugar a observar con preocupación la escena, dominada por humo, polvo y sirenas, que trajo los peores recuerdos.
Tras la explosión, varios edificios de oficinas fueron evacuados por las autoridades y la zona cercana al cruce de la Quinta Avenida y la calle 41 se llenó de ambulancias
El hecho se produjo en una hora pico de movimiento en una zona que de por sí es muy transitada todo el día.



