Demoró en llegar, pero finalmente llegó. Marcelo Tinelli dio, este jueves por la noche, el primer piquito de la temporada 2012 de ShowMatch. Lo que dejó a todos con la boca abierta fue la destinataria.

No, no fue su novia Sol Calabró, presente en el estudio y testigo de la situación. Tampoco fue su eterna pretendiente, la cordobesa Coki Ramírez. Ni siquiera fue la mediática Flor Peña, que hace poco confesó que le tiene ganas a Tinelli pero él no le da bola.

¿Quién fue la afortunada que pudo posar sus labios sobre los del conductor de ShowMatch? Nada más y nada menos que la tía de Maravilla Martínez. Sí. Graciela, tal su nombre, fue una de las protagonistas del más reciente show del dueño de Ideas del Sur.

En la gala de reggaeton, no fue ese ritmo, ni la performance de las parejas, ni la polémica del jurado lo que llamó la atención. Eso pasó a segundo plano.

Todo comenzó cuando el boxeador Maravilla Martínez bailó. Recibió una ovación y, de paso, se despidió porque debe prepararse para la pelea contra Julio César Chávez Jr. Eso implica que estará ausente por varias galas.

Para apoyar al deportista, estaba en la tribuna su fiel tía Graciela, junto a su esposo. Tinelli se puso a bailar, provocó a la señora, que terminó confesándole su amor. Bailaron en el piso. El tío de Maravilla, a todo esto, seguía en la tribuna y decidió ponerse de espaldas a la escena. El hombre es celoso. Y entonces llegó lo inesperado: el piquito.