Este domingo, en La Chispa, paraje ubicado a unos 160 kilómetros de Rosario, un nene de 8 años manipuló un arma y mató por accidente a su hermano de 11. Autoridades policiales confiaron que la escopeta calibre 20 estaba registrada y tenía los papeles en regla. Detallaron que el papá estaba "conmocionado" ante la situación, en tanto que el chiquito "no salía de su llanto". La mamá no se encontraba en el lugar del accidente.

El comisario Daniel Cabrera, subjefe del departamento General López, aseguró en Radio 2 que el momento posterior al accidente fue "bastante triste" y que había "mucha confusión" en la familia en torno a lo sucedido.

"Estaba el papá junto a sus dos hijos en la estancia donde estaba trabajando, cerca del paraje La Chispa, a unos 10 kilóemtros. La mamá se encontraba en la zona urbana, no estaba con ellos", precisó.

"En un momento dado, sienten un disparo y van a ver a los chicos. Se encuentran con esta situación bastante traumática, tanto para el joven de 8 años como para el papá. Llaman a la ambulancia pero fallece", detalló.

"El papá estaba totalmente conmocionado, el menor de 8 años también, no salía de su llanto",contó. Al menor lo atendió una psicóloga "pero no se tomaron declaraciones", confió el comisario, debido al estado de shock de ambos.

"La escopeta estaba registrada. No sé el uso que le darían en la estancia, pero en cuestiones legales está bien", sostuvo. Planteó, sin embargo, que "no es lo más conveniente que (el arma) esté al alcance de los chicos".