Al menos 18 personas murieron y más de 20 resultaron heridas al explotar un coche bomba al paso de un convoy militar extranjero cerca del protegido complejo de la embajada de Estados Unidos en Kabul, según informaron fuentes policiales.

 

El suceso, al parecer obra de un terrorista suicida, se desencadenó en la plaza más concurrida ubicada en el centro de la ciudad de Kabul. Causó la muerte de un soldado extranjero, aunque se teme que esta cifra aumente sustancialmente pues todavía no hay informaciones certeras respecto a las víctimas mortales.

 

Un comunicado de la coalición militar dirigida por Estados Unidos sólo indicó que el ataque provocó "bajas en la coalición", pero sin dar apenas detalles.

 

Según la nota, el objetivo del atentando era un convoy militar de la coalición que circulaba cerca de la legación estadounidense.

 

Este suceso sigue al del lunes pasado, cuando un ataque suicida contra un convoy de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) provocó cuatro muertos, entre ellas un soldado británico, y once heridos.

 

Kabul era hasta ahora una de las ciudades más seguras del país y donde hay mayor control policial y militar, por lo que no eran frecuentes los ataques suicidas.

 

Los actos violentos no dejan de repetirse prácticamente cada día en Afganistán, que está viviendo uno de los periodos más sangrientos desde la caída del régimen talibán a finales del 2001.