Un casco azul argentino que integraba una misión humanitaria en Haití murió en el fuerte terremoto que se registró ayer en la isla y causó incontables pérdidas humanas y materiales.
 
Se trata de Gustavo Gómez, un gendarme de 33 años que se encontraba prestado servicios en Puerto Príncipe. Su cuerpo estaba entre los escombros de una oficina oficial que se desplomó, según informó el vocero de Gendarmería, Pablo Claudio Lavenir. 
 
Gómez, que era cabo primero, se encontraba en Haití desde el día 29 de abril del 2009 y su misión iba a terminar en agosto próximo. La víctima, oriunda de Buenos Aires, estaba casada y tenía dos hijos, de 4 y 3 años.