Un taxista presuntamente alcoholizado se llevó puesto con su vehículo a varios autos que estaban estacionados. El extraño accidente sucedió este viernes a la madrugada en la zona de Mendoza al 6 mil y, afortunadamente, sólo tuvo como consecuencia un herido leve: el chofer del taxi, quien se golpeó la cara.

Los otros "heridos" fueron los autos estacionados: un Renault 9 y un Renaul 18 que, en la esquina de Mendoza y Garzón, estaban estacionados tranquilamente hasta que recibieron un fuerte impacto por parte de un taxi, que destrozó bastante al primero, que a su vez chocó al segundo.

El conductor "de lo que queda del Renault 9", como él mismo se presentó a Radio 2, señaló que salvó su vida por pocos minutos. "Hacía treinta segundos que me había sentado en el bar a tomar un café, zafé de milagro", se sorprendió. El hombre explicó que su promotor de seguro, que tras su llamado se presentó en el lugar, le informó que la versión del taxista era que "mientras manejaba contaba la recaudación del día", y por ese motivo se habría producido el choque. Sin embargo, fuentes policiales indicaron que el conductor del taxi tenía varias copas de más.

Otro taxista fue también este viernes protagonista de un hecho policial. En este segundo caso, un pasajero denunció que un chofer le disparó y le pegó un culatazo luego de enterarse de que no tenía plata para el viaje y que pensaba pedirle a la madre al llegar a hogar, destino final del viaje.

Al parecer, dos chicos tomaron un taxi en Santa Fe y Constitución rumbo a Fisherton, donde viven. Según declaró después uno de los jóvenes a la Policía, tras escuchar el chofer una conversación que mantenían los pasajeros, en donde uno le indicó al otro que le iban a pedir dinero a su madre para pagar el viaje, los hizo descender, los amenazó con un arma, hizo disparos de advertencia al piso y luego le pegó un culatazo a uno de ellos.