Ya es un tradición que, al entrar a un teatro o cine, se escuche la voz de un amable locutor que pide a los espectadores que tengan la amabilidad de apagar o silenciar sus celulares. Sin embargo, también existe la otra tradición: muchas personas desoyen el reclamo y los teléfonos suenan invariablemente a mitad de las funciones. E incluso muchos tienen el tupé de atender la llamada.

Para evitar el indeseado concierto de ringtones, un teatro ruso decidió bloquear las señales de móviles para que no suenen en plena actuación. Es una iniciativa algo drástica, pero según las autoridades de la institución es totalmente necesaria.

Se trata del teatro más antiguo de Rusia, el Alexandrinsky. Allí instalaron un costoso equipamiento que permite bloquear las señales de teléfonos móviles.

"Aunque la tecnología es cara, nuestro teatro aceptó los costes para proteger a los artistas de sorpresas ingratas", aseguró a la prensa Alexander Chepurov del teatro Alexandrinsky de San Petersburgo, que fue fundado en 1756. El hombre comentó, incluso, que un actor se había visto obligado a ocuparse de los "ruidos" de la única manera que pudo, declamando: "¡Apaguen esos estúpidos teléfonos y déjenme terminar mi monólogo!".