Una vez más, un niño cae herido al ser sorprendido por una bala perdida. Este sábado, un disparo impactó contra una beba de apenas 20 meses mientras tomaba aire en brazos de su madre en la vereda de su casa, en la zona sur de Rosario. En noviembre pasado, una nena de 7 años salvó su ojo de milagro luego de atravesar una situación similar.
Consultada por el periodista Fernando Carrafiello, del móvil de Radio 2, la directora del Hospital de Niños Víctor J. Vilela, Stella Binelli explicó que la beba ingresó al centro de salud este sábado por la noche luego de pasar primero por el Roque Sáenz Peña donde le realizaron los primeros cuidados. La bala perdida había dañado su cabeza e intestinos.
Tras una intervención quirúrgica, la nena se encontraba ya “estable y compensada” aunque aún no podía tomar alimentos y recibía nutrición paraenteral.
De acuerdo al relato de la madre, la niña habría recibido el impacto del proyectil mientras la sujetaba en brazos en la vereda de su casa, en Bermúdez y Casilda. La sofocante temperatura del sábado las había obligado a salir afuera en busca de aire.
Gloria Baggio, jefa de Clínica Pediátrica del Vilela, actualizó el estado de la beba en De 12 a 14 (El Tres): “Continúa en terapia intensiva, pero la evolución en estas primeras horas ha sido favorable”.
Además, la médica reconoció que “en los últimos años se han incrementado notablemente los casos en los que niños se ven involucrados en hechos de violencia urbana”.