Se casó con su novio muerto. Sí, tal como en el cuento animado de Tim Burton "El cadáver de la novia". Una francesa de 26 años contrajo enlace con su prometido... aunque este se había muerto en un accidente un año antes.

Magali Jaskiewicz se convirtió en viuda en el mismo momento en el que dio el "Sí, quiero", según publica el diario británico The Guardian. Es que la legislación francesa permite este tipo de casamientos.

La joven se casó con Jonathan, su pareja y con quien vivió seis años. Además, el padre de sus dos hijas. El hombre falleció en un accidente de tráfico hace un año.

La idea, lejos de ser romántica, tiene que ver con la posibilidad de Magali de convertirse en viuda para la legislación. Esta joven viuda no celebrará el enlace, según comentó a los periodistas:  "voy  a tomarme un café y dar las gracias a aquellos que me han apoyado".

Christopeh Caput, el alcalde que ofició la ceremonia aseguró que la petición de Magali era "sólida". Según la legislación gala, las bodas póstumas son posibles siempre que existan evidencias claras de que el fallecido tenía intención de contraer matrimonio con esa persona mientras estaba viva. Magali y Jonathan acudieron al ayuntamiento para pedir cita para su casamiento dos días antes de que el joven falleciera.

Aunque infrecuente, se celebran docenas de ellas cada año en Francia, según el gobierno.