Una mujer brasileña llevó sin saberlo durante veintitrés años un bisturí en el abdomen y a finales de este mes será sometida a una operación para extraerle el objeto en un hospital de la ciudad de Goiania.

María Abadia Dias de Oliveira, de 47 años, sufrió desde los 24 años fuertes dolores abdominales y en la columna debido a la negligencia de los médicos que la trataron, informa el diario O Globo.

La pieza, de aproximadamente cinco centímetros, fue olvidada por los médicos durante una cesárea en 1984 en un hospital de Campos Belos, a 625 kilómetros de Goiania.

Abadia, quien sufrió complicaciones en el embarazo de su última hija, permaneció tres días en coma tras la cesárea y tardó meses en recuperarse.

La mujer pasó la mitad de su vida intentando descubrir la causa de los extraños dolores de estómago, trató con varios médicos y tomaba analgésicos y antiinflamatorios para suavizar los dolores.

Además de los dolores físicos, Abadía asegura haber sufrido daños morales, con impedimentos como el no poder pasar por detectores de metales.

"Decían que no tenía nada, que eran cosas de la edad", declaró indignada al diario O Globo.

Una radiografía le descubrió finalmente a principios de este mes el origen de su martirio.

El cirujano que practicará la operación de extracción del bisturí dijo que el organismo de la mujer toleró bien el cuerpo extraño porque el metal no provoca grandes reacciones.

En esos 23 años el bisturí se desplazó en el estómago de la paciente y hoy está localizada en el lado izquierdo del abdomen, 30 centímetros por encima del lugar donde le fue practicada la cesárea.

Abadia pretende abrir un proceso judicial contra el hospital en el que le practicaron la cesárea después de la retirada del bisturí.

La dirección del hospital informó de que creará una comisión para investigar el historial médico de la paciente.