A las 2.30 de este sábado a la madrugada, y por unos 15 segundos, una ráfaga de lo que se cree son los restos de un cohete chino surcaron el cielo entre el sur de Brasil y el norte argentino y soprendieron a los que a esa hora todavía estaban despiertos, según confirmaron a Télam desde dos institutos astronómicos.

No se trataba de un ovni, ni un meteorito, sino de un cohete chino cuya misión era impulsar un satélite y que, concluida su misión terminó desintegrándose apenas cruzó la atmósfera.

Télam pudo observar como la estela apareció en medio de la madrugada en la capital de Formosa y deslumbró a todos los que pudieron verla.

Blas Servin, especialista del Centro Astronómico Bicentenario de Asunción, que pertenece a la Sociedad Interamericana de la Astronomía de la Cultura, le dijo a Télam que el cohete "reingresó a la atmósfera cerca de las 2:30" y que se trataba de un impulsor para poner en órbita un satélite.

"Impactó por la intensidad de las piezas que se van quemando al rozar con la atmósfera y produce el recalentamiento. De esa manera, las piezas se encienden y generalmente se autodestruyen", explicó Servin, quien aseguró que el paso del cohete no implica riesgos.

Servin agregó que se espera que entre fines de marzo y principio de abril otro resto del cohete pueda volver a cruzar la frontera.

Ayer, en la página de Facebook del Brazilian Meteor Observation Network (Bramon - Red Brasileña de Monitoreo de Meteoros) había divulgado una alerta de reentrada de "una porción de un cohete chino que podría caer entre el norte del Chaco o de la Región Oriental o en el Estado de Mato Grosso do Sul, en Brasil".

Tanto el centro de Brasil como el de Paraguay informaron que se trataba de lanzador de satélites chino CZ-3 BR/B que tiene un largo de 25 metros por 3,35 metros de diámetro, y que había sido lanzado el 10 diciembre de 2017 por el Centro Espacial Xichang.

Además, ambos centros tenían previsto que el cohete cruzara por el estado de Paraná, en Brasil, de oeste hacia el este, entre Foz do Iguazú y Curitiba.

En Formosa fueron muchas las conjeturas que se difundieron en redes sociales entre quienes afirmaban que se trataba de estrellas fugaces o meteroritos.

Su paso también se pudo ver en el sur de Mato Grosso del Sur, el norte de São Paulo, Minas Gerais hasta el límite entre Espíritu Santo con Bahía.