La próxima vez que una mujer se sienta atraída por un hombre no tendrá que decir mucho, el vestido delator se encargará de decir si hay o no piel. Se trata de una prenda confeccionada con ribetes de cuero y aluminio que son capaces de detectar el latido de una persona: si el pulso aumenta, la tela se vuelve invisible.

El Intimacy 2.0 es un vestido diseñado por Daan Roosegaarde y busca indagar en la posible relación entre la tecnología y la intimidad de una persona. Cada vez que alguien se excita por la presencia de otro, la vestimenta se vuelve transparente. Eso si, no garantiza respuestas afirmativas.

“La tecnología en este caso no es pensada unafunción específica, sino como herramienta para crear intimidad y privacidad de un modo directo en otros nivel”, explicó Roosegaarde al Daily Mail.