Este miércoles el comisario Marcelo Villanúa asumió oficialmente la conducción de la Policía de Santa Fe en reemplazo de José Luis Amaya, quien pasa a retiro por cumplir con sus años de servicio y estar en el cargo desde el mes de agosto de 2016. El acto se realizó en la sede de la Unidad Regional de Ovidio Lagos al 5200 a las 11, y lo encabezaron el gobernador Miguel Lifschitz y el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro.

El cambio en la cúpula policial se da en medio de la escalada de la ola de violencia en Rosario que fue acompañada por un incremento de la tasa de homicidios en el inicio de año.

En contacto con la prensa, Villanúa vinculó la escalada de violencia a "un enfrentamiento entre bandas" y aunque reconoció que no están desactivadas, "su accionar ha disminuido". 

Anticipó que se "agilizará el patrullaje con fuerzas provinciales y federales" pero no habló de un refuerzo de uniformados federales. "Eso lo tienen que decidir el gobernador y la ministra de Seguridad (Patricia Bullrich)", señaló aunque aseguró que "las fuerzas federales  siempre fueron bienvenidas".

Hasta este miércoles Villanúa se desempeñaba como jefe de la Unidad Regional II. Previo a esto, fue jefe del Comando Radioeléctrico de Rosario, subjefe de la Brigada de Investigaciones y además titular de la Unidad Regional XVII con asiento en la ciudad de San Lorenzo.

Este martes el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro pasó por el estudio de Radio 2 y subrayó que “Amaya fue el mejor jefe policial de los últimos años, que recuperó la cadena de mandos y le dio otra impronta a la policía de Santa Fe. Se va porque cumplió una etapa y porque entiende que vienen nuevas generaciones”. Y agregó que “Villanúa viene a continuar ese trabajo”.