Este miércoles, luego de tres años de ausencia, volvió a funcionar el tren a las nubes. Este tren, el más alto del mundo sin cremallera, llega a los 4200 metros y recorre 434 kilómetros, de ida y vuelta, pasando por 29 puentes, 21 túneles, 13 viaductos, 2 rulos y 2 zig-zag.
Luego de una ceremonia inaugural en la estación de Salta, que contó con la presencia del gobernador Juan Manuel Urtubey, del secretario de Turismo nacional, Carlos Meyer, y del ministro de Turismo provincial, Horacio Cornejo, el primer servicio partió esta mañana, a las 7.15, hacia el viaducto La Polvorilla, previo paso por San Antonio de los Cobres.
En una primera etapa operarán tres viajes semanales domingos, miércoles y viernes, que atravesarán el imponente paisaje de la Puna y por una vía considerada obra maestra de la ingeniería. Quienes quieran participar de este espectacular viaje deberán desembolsar 140 dólares si son extranjeros y 100 si son argentinos (aunque los salteños tendrán aún más descuento: pagarán 60 dólares).
Se trata de una de las excursiones argentinas más populares en los mercados internacionales de viajes, que estaba suspendida desde julio de 2005, cuando dejó varados a 500 turistas por falta de un adecuado plan de evacuación. Esto motivó a revocar la concesión y comenzar un nuevo proceso licitatorio, lo que llegó su tiempo.


