Roger Federer ganó este domingo la final de Wimbledon ante Andy Murray y volvió a conquistar el primer puesto del ranking mundial a partir de esta semana. El suizo se impuso por 4-6, 7-5, 6-3 y 6-4, y se quedó con su séptimo título en All England. El escocés buscaba ser el primer local en coronarse en este certamen desde 1936 pero no tuvo éxito.

El primer set fue cambiante y emocionante, ya que en el primer game Murray logró quebrar el saque de Federer y tras obtener el suyo se adelantó rápidamente 2 a 0.

Pero el suizo logró reaccionar y tras mantener su servicio en el tercero, pudo adueñarse en el cuarto game con el saque del escocés y puso el parcial 2 a 2 y estableció la igualdad en el juego, paridad que se mantuvo hasta el noveno punto.

Murray, tras retener con esfuerzo su saque en el octavo game, pudo quebrar nuevamente en el noveno y se adelantó 5 a 4, para quedarse con el set en game siguiente con su servicio por 6 a 4.

El segundo set fue también parejo, pero con la sensación de que en el escocés se quedaría con el mismo en todo momento, ya que ganaba los saques con tranquilidad y exigía al suizo cuando éste disponía de su servicio, tanto es así que Federer debió esforzarse en el quinto y en el noveno game para que Murray no quebrara.

Pero el set se extendió y Federer pudo quebrar en la primera instancia en la que dispuso en el duodécimo game y se quedó con el set por 7 a 5 y con la posibilidad de volver al partido.

El tercer set comenzó con la misma intensidad, pero el partido fue interrumpido en el tercer game con `score` 1 a 1 y 40-0 para Federer, debido a que comenzó a llover y hubo que esperar que se cerrara el court central con el techo corredizo.

Tras un poco más de 50 minutos se reanudó y Federer comenzó a dominar el juego, por lo cual no extrañó que quebrara en un interminable sexto game para ponerse 4 a 2, encaminar el set y quedarse con el parcial por 6 a 3, ante un nervioso Murray.

En el cuarto set se prolongó la supremacía de Federer, quien volvió quebrar en el quinto game y doblegó la resistencia de Murray, quien a pesar de jugar un partido espectacular, observaba como el partido se le escapaba de las manos.

El suizo cerró el match con un 6-4 en el cuarto set, ratificó porque es el mejor de la historia en este deporte y logró su objetivo de regresar a la cima y superar al mítico Pete Sampras.

El suizo nacido en Basilea el 8 de agosto de 1981 se había coronado en Wimbledon en 2003, 2004, 2005, 2006, 2007 y 2009.

Además, el helvético igualó el record de siete títulos en manos del británico William Renshaw -campeón en la prehistoria del torneo- y del estadounidense Pete Sampras, y estiró su cosecha a 17 títulos de Grand Slam, y a un total de 74 títulos ATP en su carrera.