La fábrica de documentos nacionales de identidad (DNI) que inauguró el miércoles la presidenta Cristina Fernández de Kirchner ya produjo las primeras 50 mil unidades, que fueron entregados para ser distribuidos en las diferentes provincias.

Los DNI fueron retirados de la planta del Renaper por el Correo Argentino, y a dos días de la puesta en funcionamiento de este sistema comenzaron a ser enviados a los domicilios de los ciudadanos que los solicitaron, tal como adelantó el ministro del Interior Florencio Randazzo.

El nuevo documento argentino, que se confecciona con los colores celeste y blanco, se desarrolló a lo largo de poco menos de dos años y demandó en una inversión total de 18 millones 62 mil dólares.

En el caso de los DNI para los recién nacidos siguen siendo gratuitos, mientras que la renovación de los 16 años –que no es obligatoria– tiene un costo de 15 pesos.