En la segunda gala del aquadance, las aguas de Bailando 2018 –el programa que seguís en las noches de El Tres– no estuvieron calmas. La participante Mica Viciconte cumplió con su rutina y, a la hora de las devoluciones, se encendió la mecha con la preguntas de Ángel de Brito

“¿Qué te pasa con Laurita Fernández? Escuché que decías que era falsa, aburrida y mala compañera”, le preguntó el periodista.

“Sí, es verdad”, contestó con contundencia y agregó: “Trabajé con ella en otro programa y cuando sufrí maltrato, se puso del lado de la producción y no de la participante”.

“¿Te aburre como jurado o como figura?”, le consultó Marcelo Tinelli al ver que no había nada de onda entre las ex compañeras de Combate.

“Me parece que no es justa como jurado. Cuando está su mamá, habla cuatro horas y le pone un diez. En la eliminación, se fueron dos muy buenas parejas y no fue justo”, continuó Mica.

“¿Te quedó algo más atragantado?”, interrogó de Brito.

“No, ahora estoy re bien. Ella no va a a cambiar el puntaje porque yo le chupe las medias como hacen un montón. Prefiero que me odien por como soy a ser falsa y que me quieran por eso”, respondió la participante.

“¿Laurita vino?”, comentó ácido el periodista y enseguida la jurado tomó el micrófono: “Sí, vine. Lo que pasa es que no necesito hablar mal de los demás para sentirme bien“.


Entonces, la disputa se abrió.

“Cuando la conocí pensé que era una buena mina, después me di cuenta que no. Ella no tiene amigas mujeres y no la quiere nadie del ambiente, por algo es”, lanzó Viciconte.

Pero Laurita prefirió bajar el tono: “Respecto a lo que dijiste, es lo que vos pensás. No voy a discutir con vos, no me interesa”.

“Te creés más por estar ahí”, concluyó Mica, ya exaltada por el ida y vuelta.

La devolución de Laurita