La dupla de realizadores alemanes Jantje Friese y Baran bo Odar, creadores de la exitosa serie de suspenso y ciencia ficción Dark, intentan jugar con la cabeza de los espectadores una vez más con 1899, tira de época, misterio y terror que sigue a un grupo de migrantes europeos cuyo viaje hacia Nueva York por mar se transforma en una oscura pesadilla, y que llega este jueves a Netflix.

El sospechoso clima de la trama se establece desde un inicio, con la presentación de la británica Maura Franklin (Emily Beecham), una neuróloga –y una de las primeras mujeres médicas de su país, aunque en aquel entonces no se les dejaba practicar su profesión-–que pasa los días atormentada por la pérdida de su hermano.

Este desapareció meses atrás mientras viajaba hacia Estados Unidos en el buque Prometeo.

Maura se embarca con el mismo destino en el Cerbero, nave de vapor que aloja a una variadísima cantidad de pasajeros y tripulantes de distintos puntos de Europa.

En la nave viajan un párroco español y su hermano, una parea de franceses recién casados, una empobrecida y ultrarreligiosa familia danesa y una geisha y su asistente.

La confusión se eleva a otro nivel cuando el capitán del barco, el alemán Eyk Larsen (Andreas Pietschmann, recibe una señal de socorro del Prometeo y decide dirigirse hacia el origen del mensaje.

Así, el encuentro con el buque presuntamente perdido pone en funcionamiento toda una serie de eventos e incidentes inexplicables que no sólo los aterrorizarán sino que también revelarán diferentes secretos de cada uno de los personajes.

Hablada en inglés, español, francés, polaco, alemán, danés, portugués y hasta cantonés, 1989 está motivada por la crisis de migración en el continente y el Brexit, referéndum que en 2016 aprobó la salida del Reino Unido del bloque europeo.

Rosalie Craig, Aneurin Barnard, Miguel Bernardeau, Maciej Musial, José Pimentão y Alexandre Willaume, al igual que  Mathilde Ollivier y Jonas Bloquet integran el elenco.