La ola de hurtos de piezas de bronce no respeta objetos de valor histórico. Placas recordatorias en cementarios son blanco de robos en forma cotidiana, al igual que otros elementos más comunes, como picaportes y medidores que se venden al peso en chatarrerías de pocos escrúpulos.

Ahora le tocó a una urna funeraria en cuyo interior descansan los restos de un granadero santafesino que combatió junto con el prócer José de San Martín en la campaña libertadora del Ejército de los Andes (1817).

El intento de robo tuvo lugar el pasado jueves en la ciudad de Santa Fe, a plena luz del día, frente a Tribunales y la Casa de Gobierno. Afortunadamente, fue frustrado por una mujer religiosa que advirtió la maniobra.

El 10 de noviembre, al mediodía, un hombre ingresó a la Catedral Metropolitana y sin oposición alguna cargó la pesada urna y la colocó en un changuito de supermercado, contó Gerardo Gómez, presidente de la Asociación Cultural Sanmartiniana de Santa Fe, a El Tres.

"Casi lo logra", dijo Gómez, que reclamó celeridad en la investigación.