Maximiliano Pullaro brindó su primer discurso como gobernador frente a la Asamblea Legislativa para inaugurar el 142º período de sesiones ordinarias en la Legislatura, este miércoles en la ciudad de Santa Fe y a cinco meses de haber asumido en el cargo. El mandatario cuestionó la herencia recibida de la gestión anterior de Omar Perotti, se refirió a la delicada coyuntura macroeconómica de Argentina que repercute en la provincia y dejó en claro que sus prioridades son seguridad, educación, producción y obra pública, diferenciándose en este último aspecto del gobierno nacional.

El mensaje de Pullaro empezó a las 11.45 y se extendió durante casi una hora. De entrada, el jefe de la Casa Gris advirtió que “los números” de la administración provincial son condicionantes que no puede “ignorar” ni “esconder bajo la alfombra”. 

“El año 2023 finalizó con una fuerte contracción macroeconómica que implicó una caída interanual del 1,6% del PBI, el cual aún sigue sin alcanzar el nivel del año 2017”, expresó y abundó que esa coyuntura se agravó en 2024 con “tasas de inflación de los últimos seis meses que no se registraban desde hace tres décadas, donde las economías familiares sufren un deterioro notable, con aumento exponencial de la pobreza y la indigencia”.

En el mismo sentido, describió que asumió la gestión con “un sistema productivo dañado y con un Estado Provincial en déficit".

“En el ejercicio económico 2023, la Administración Provincial finalizó con un déficit de $131.111 millones, la deuda flotante alcanzó el tercio de billón de pesos mientras que la planta de personal registró 10.460 cargos y 86.790 horas cátedra más que 4 años atrás”, sintetizó sobre el cierre del mandato de Omar Perotti, su antecesor.

También puso en la balanza el incremento de la planta del sector público como condicionante de la administración de recursos: “Explica el 71% del déficit del año 2023, y además tiene consecuencias que van más allá de las contingencias del año: una sequía tiene efectos que luego cesan, pero el incremento significativo de la planta de personal deja efectos de largo plazo que impactan de forma múltiple”.

Destacó que se logró “una reducción del orden del 40% en términos reales de los gastos de funcionamiento durante el primer trimestre” a través de la reducción de ministerios, el impedimento que cualquier funcionario, incluido el gobernador, se hospeden en hoteles que superen las tres estrellas, la reducción del uso de autos oficiales, la eliminación de la flota de equipos de telefonía para funcionarios, y un control estricto del gasto de combustible. 

De todas formas, el gobernador señaló que “el agravamiento de la coyuntura macroeconómica que incide sobre los recursos” hará “muy complejo continuar compensando el déficit del año anterior”.

Seguridad pública

Pullaro remarcó que una de sus prioridades es la lucha contra la inseguridad, el crimen organizado y el narcotráfico, flagelos que azotan a la provincia y con especial fuerza a Rosario desde hace años

Expresó que para “recuperar la paz” es un requisito indispensable “recuperar el control dentro de las cárceles y aumentar en cantidad y capacidad la operatividad policial”. En esa frase sintetizó su visión y las acciones vinculadas a una de las principales demandas de rosarinos y santafesinos.

En ese marco, en lo penitenciario, enumeró que se “intensificó la cantidad de requisas, hicimos más eficientes los controles en los ingresos y a las visitas y limitamos –cada vez con mayor intensidad– la capacidad de estos delincuentes de ordenar el delito desde las cárceles”.

Sobre la reacción por parte de los narcos y sicarios tras el endurecimiento de los controles, advirtió que “están dando la pelea por recuperar ventajas y privilegios que el Estado en su conjunto no puede ni quiere concederles. Por eso apelan al terror para que una sociedad atemorizada se rinda e inste a los gobernantes a dar marcha atrás”.

“Que les quede bien claro a todos: no hay pacto posible con los delincuentes. Santa Fe no va a dar ni un paso atrás”, enfatizó. En ese tramo del discurso, hizo un espacio para volver a enviar condolencias a los familiares de las víctimas del narcoterrorismo y se comprometió a que “este gobierno no los dejará solos”. Y agradeció el respaldo político recibido por todo el arco político e institucional de la provincia y el país por las amenazas recibidas.

Pullaro anunció que ya se licitó una obra para sumar 160 celdas con capacidad para 320 reclusos en la Unidad 5 de Rosario y en el departamento La Capital sumarán espacio para 880 personas. "En la Unidad de Piñero, construiremos celdas para 2.432 presos, entre ellos los 1.152 de alto perfil que ya se encuentran alojados allí”, anticipó.

Tiene proyecto además sumar "2.459 celdas, para 3.632 reclusos, con una inversión de 227 millones de dólares”, enumeró, y agregó que a eso se sumará “tecnología con sistemas de scanner, detectores y videovigilancia y de personal”. Además recordó que está en marcha la incorporación de 373 agentes al servicio penitenciario.

Sobre la cantidad de patrulleros en las calles, aseguró que "en Rosario pasamos de 20 móviles a un promedio de 140 y en la ciudad de Santa Fe de 9 a 70”. Además, en el marco de la Ley de Emergencia en Seguridad, “ya adquirimos 100 móviles” y este jueves “se abren los sobres de ofertas para la compra de 700 patrulleros, y está en marcha la adquisición de 500 motos, armamento y chalecos”.

Hizo mención también a la batería de leyes contra el delito impulsada por el Ejecutivo y que la Legislatura aprobó, como la adhesión a la Ley de Microtráfico, que permite a la Justicia provincial perseguir el narcomenudeo, que habilita el derribo de búnkers.

Educación

Pullaro señaló que quiere “escuelas abiertas, maestros enseñando y chicos aprendiendo” para referirse al sistema educativo de Santa Fe y en medio de fuertes tensiones con los gremios docentes desde el comienzo de su mandato por los salarios, entre otras cuestiones reclamadas por los trabajadores. 

Aunque agradeció a los maestros por su labor y aseveró que realizan “esfuerzos importantes para mejorar el salario docente mes a mes”, el gobernador fue tajante con respecto al ausentismo y definió que “ningún sistema puede ser eficiente con un 32,7% de ausentismo laboral y cuando tiene que destinar un tercio de los recursos para salarios en el pago de reemplazos”.

Por eso, justificó el incremento de controles e incentivos que le permitieron aumentar “la cantidad de auditorías tanto médicas como administrativas, y de juntas médicas y se estableció un sistema de detección de licencias recurrentes y de profesionales que expiden mayor cantidad de certificados”.

Prometió que la provincia va a construir 250 salones con equipamiento tecnológico por cada año de gestión y que hoy se están ejecutando obras en 511 edificios escolares de los 1600 planificados para 2024.

Producción y obra pública

Pullaro, en cuanto a producción, recordó acciones puestas en marcha y también los planteos llevados a Nación. “Le señalamos el error de querer incrementar la recaudación imponiendo más tributos al campo y la industria o desregulando totalmente mercados como el del biocombustible”, acotó.

“Vamos a invertir 5.000 millones de pesos en 26 obras de electrificación rural”, afirmó y para valorar luego la puesta en marcha de Santa Fe Global, “para brindar asistencia técnica a más de 100 empresas en la internacionalización de sus negocios”. 

Pullaro se diferenció del ajuste nacional y “la estigmatización” de la obra pública de parte del presidente Javier Mieli: “Se puede hacer la inversión pública provincial cuando hay visión, determinación y transparencia”, dijo y se refirió a los siete frentes en marcha para reparar rutas provinciales.

“Trabajamos en 27 proyectos de nuevas rutas, pavimentaciones y puentes para licitar en este año a lo largo de todo el territorio”, contó. “Ya hicimos 8 llamados a licitación para obras de arquitectura, y están en desarrollo otros 62 proyectos”, marcó.

La apertura de sesiones ordinarias tuvo un lugar un día después de la maratónica sesión en el Congreso en la que el gobierno nacional logró la media sanción de la Ley Bases, un proyecto que Pullaro y los diputados de su espacio acompañaron