La agencia sanitaria regional de la Organización de Naciones Unidas (ONU) dijo que "las consecuencias de la baja vacunación es la aparición de brotes de enfermedades que durante años habían estado bajo control: un brote de sarampión en Brasil y la transmisión de la difteria, una enfermedad que amenaza el crecimiento y el desarrollo de los niños, en Haití y la República Dominicana".

En declaraciones al portal Noticias ONU, la directora general de la OPS, Carissa Etienne, destacó que durante los últimos dos años "millones de niños de la región no ha acudido a sus visitas médicas rutinarias, una situación que les ha impedido continuar con sus esquemas de vacunación".

"De hecho, la cobertura de vacunación ha descendido tanto que los países corren el riesgo de perder dos décadas de progreso en materia de inmunización", advirtió la especialista.

"Brasil, por ejemplo, está luchando contra un brote de sarampión, mientras que Haití y la República Dominicana están luchando contra la transmisión de la difteria, que amenaza el crecimiento y el desarrollo de los niños", explicó.

Etienne indicó que los países "deben priorizar la cobertura entre los grupos con mayor riesgo de enfermedad y muerte por Covid-19 antes de considerar la de los niños, especialmente en los países del Caribe donde la cobertura entre los ancianos y los grupos de riesgo, como los trabajadores sanitarios, sigue siendo baja".

Sin embargo, se mostró partidaria de inmunizar a los menores en los doce países y territorios del continente que ya alcanzaron el objetivo de cobertura de vacunación del 70% fijado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

"En estos países, en los que ya se ha protegido a los grupos vulnerables y en los que puede haber suministros adicionales de vacunas, los países deberían considerar las ventajas de vacunar a los niños para reducir aún más la transmisión del SARS-CoV-2", agregó.

Respecto a la evolución del coronavirus en el continente, Etienne destacó que los más de ocho millones de nuevos casos de Covid-19 detectados durante la última semana son el mayor registro desde el inicio de la pandemia y que supone un crecimiento de un 32% respecto a los siete días anteriores.

"Las muertes en toda la región también aumentaron, con 18.000 nuevos fallecimientos que suponen un aumento relativo del 37% respecto a la semana anterior", anunció.

En todo el mundo, la variante ómicron sigue batiendo todos los récords: la semana pasada hubo 21 millones de casos nuevos, el mayor número de la pandemia.

También indicó que, pese a una disminución de casi un millón de casos durante la última semana, Estados Unidos continúa teniendo el mayor número de nuevas infecciones, y que en muchos estados del sur de México éstas se han triplicado en los últimos siete días.

En América Central explicó que las muertes semanales aumentaron un 107% en comparación con la semana anterior, con Belice registrando las tasas más altas de nuevas infecciones.

Los casos de Covid-19 se duplicaron aproximadamente cada dos días en Paraguay, las infecciones son especialmente altas en Bolivia, Perú y Ecuador, mientras que el número de casos en Brasil creció un 193% respecto a la semana anterior.

"Como los casos de Covid se están propagando más activamente -y más rápidamente- que nunca, está claro que ómicron se ha convertido en la cepa de SARS COV2 predominante en nuestra región en este momento", recalcó Etienne.