Las tendencias gastronómicas evolucionan día a día, según las necesidades de los miles de usuarios que cada vez exigen más y mejores preparaciones. En el caso de la cocina saludable, es donde más novedades encontramos, ya que el comer saludable y “rico” se convirtió en un gran desafío.

Una de las formas de preparación saludable que se volvió muy popular en el último tiempo son los “bowl food”, comida que está distribuida en distintas cantidades dentro de un bowl y que además de apetitoso, es saludable, ya que ayuda a quienes llevan planes de alimentación más estrictos, a controlar las porciones y a engañar la mente con preparaciones que además de ricas se ven bien.

Esta moda, quizás que podría enmarcarse más en una cuestión de "lifestyle" que gastronómica, causa furor en la Costa Oeste de Estados Unidos y en Europa, y tiene su correlato en redes sociales como Instagram y Pinterest, en las que las fotos de apetitosas y coloridas comidas servidas en bowls se multiplicaron por millones.

Actualmente las imágenes de desayunos, almuerzos y cenas servidos en bowls se propagan por la red social e imponen tendencia a la hora de servir comida. Hasta el momento en Instagram hay más de 1,4 millones de publicaciones de batidos, yogures,  postres con la etiqueta #smoothiebowl.

En tanto, los platos salados están categorizados con la etiqueta de #bowlfood, con la cual es fácil encontrarlos.

En general los bowl food se componen de variedades de vegetales, como lechuga, tomate y distintas verduras. Además, para vegetarianos o quienes llevan una dieta reducida en carne, es posible agregar una porción de legumbres, o bien para quienes comen carne, agregar alguna proteína de origen animal como carne, pollo, pavo o pescado.

Desde que se disparó la moda de comer en bowl, un gran número de restaurantes de moda llegaron incluso a deshacerse de sus platos para mudarse a los cuencos, que de por sí ya se usaban hace cientos de años en China y Japón.

Es necesario destacar que solo durante el 2017 esta tendencia llegó a varias librerías de Estados Unidos, Londres y España en al menos siete libros dedicados a recetas de “Bowl Food”.

 

Aunque suene inverosímil, hay estudios que afirman que todo tiene que ver con la forma en que una variedad de estímulos sensoriales puede afectar nuestra percepción del sabor e incluso el nivel de plenitud que sentimos después de comer.

¡Esta tendencia ya se apoderó de la web y los fudis mueren por preparar su propio bowl!