Para muchos un postre, para otros un permitido. Ante el calor excesivo existen muchas personas que prefieren reemplazar un plato de comida por un conito o una taza de helado. Lo cierto es que hay una amplia variedad para degustar y sobre gustos no hay nada escrito.
A pesar de que el helado dejó de ser un producto estacional del verano, la innovación en gustos de consumo cautiva a los paladares cuando llega la primavera. Hoy, cada vez más se consume sin importar la época del año y las heladerías hacen foco para que esta tendencia siga en auge.

 

El helado ya derribó la barrera de lo dulce. Dulce de leche con maní salado, mate cocido, crema de calabaza y naranja, pretzel salado con caramelo de chocolate y el chocolate con aceto balsámico: la lista de los gustos “locos” es extensa y ya seduce a los clientes.

El chocolate cubierto con papas fritas o pororós sería otro ejemplo de una nueva tendencia llamada “helado snack”.

 

Desde hace algunos años en muchas heladerías se ofrecen los por ellos bautizados “Sabores de Vendimia”. Son cinco variedades que están hechas a base de vinos o bebidas destiladas:

1- Kinotos al wisky

2- Vainilla al malbec

3- Melocotón al syrah

4- Ananá viognier

5- Maracuyá sauvignon blanco

Otros sabores que contienen alcohol son el grasshopper y el brandy con crema de menta.

 

También se consumen mucho son los que están fabricados a base de quesos: el cheesecake maracuyá con frutos rojos, la tarta de queso con “terciopelo rojo” y el mascarpone con frutos del bosque.

 

Imaginación al poder

 

La imaginación y la creatividad no tienen límites en el mundo de los helados, sobre todo cuando llega el verano. En las heladerías brotan cubetas con sabores y formas sugerentes y en las cuales el factor sorpresa desempeña un papel importante para atraer al público con propuestas tan originales como el helado de boquerón en vinagre y el de violeta con chocolate amargo.

 

Creaciones internacionales

 

- Helado espagueti: Alemania nos comparte este juego de pastas; un helado de vainilla suave y aterciopelado se extrae por medio de un fabricante de pastas, quien le da una apariencia que engaña a la visión y parece un granulado de espagueti.

- Helado negro: Se le llama también Ponidark, lo novedoso es que es un helado totalmente negro desde el cono en el que está servido y hasta la galleta unicornio de decoración. A pesar de su color existen todo tipo de sabores diferentes.

- Helado neón: Gran Bretaña trae este novedoso helado, influenciado por clubes nocturnos de neón de los años 70. Los británicos nos llevan a esta locura endulzada utilizando medusas de proteína para hacer brillar los helados en la oscuridad.

- Helado de pizza: Aunque suena descabellado este helado existe tal cual, y es obra de Little Baby’s Ice Cream, una peculiar heladería en Philadelphia, Estados Unidos, que se propuso crear helados de sabores peculiares.

- Helado de cardamomo: El cardamomo es un ingrediente popular en la repostería de la India. Sorprendente por su aroma único, en la India se sirve este delicioso y nutritivo helado que se acompaña con agua de rosa y pistachos con almendras.

- Helado de caviar: Uno de los más grandes creadores de helados, el francés Philippe Faur, ganó fama a nivel mundial por sus creaciones innovadoras. Su último gran éxito es el Sorbete de caviar, o sea un mantecado de caviar.

 

Está claro que el helado, sea de cualquier sabor, evoca momentos de relax y felicidad. Después de descubrir la inmensa variedad que existe ¿seguirán fieles a los sabores clásicos o van a dar paso a los gustos exóticos?