No es llueve sobre mojado. Sino sequía sobre bajante. A los trastornos logísticos y productivos que genera la histórica bajante del Paraná al complejo portuario del Gran Rosario, corazón productivo de la región, se le sumó la agobiante seca.

Esta semana, la Bolsa de Comercio de Rosario le puso números a las pérdidas que provocará el recorte del 15% en las proyecciones de la cosecha de maíz y soja por el stress hídrico que sacude a todo el país. Y el número fue escalofriante: 4.800 millones de dólares, casi un punto del PBI. Y eso sin contar que dejarán de ingresar al país 2.665 millones por divisas de exportación, una caída del 10% respecto al año pasado. El tema es que ningún plan de negocios en la ciudad puede soslayar que el agro tendrá la billetera menos cargada que en 2021. Dicho esto, arrancamos con el run run de negocios de la semana:

1) Hablando de la bajante, el arroyo Ludueña es un hilo de agua. Pero eso no detuvo el armado de un nuevo proyecto comercial para la zona. Puerto Ludueña, el puerto náutico desarrollado y gerenciado por la constructora Obring, acaba de terminar de acordar con la Municipalidad el armado allí de locales comerciales, espacios multiuso con muchas galerías y espacios abiertos para gastronomía y eventos; todos adaptados a nueva realidad pospandemia. El masterplan ya está aprobado por la secretaría de Planeamiento y el área de Concesiones, y ahora sólo resta presentar el proyecto ejecutivo, que es un trámite ordinario. Como novedad, dentro de ese masterplan, hay un predio que Obring acordó con el club Regatas para que lo usen como campo polideportivo mientras dure la concesión. La desarrolladora no cede nada a Regatas, ya que es un entendimiento dentro de la concesión. A todo esto, Puerto Ludueña acaba de terminar la construcción de un varadero para el izaje y mantenimiento de barcos de hasta 25 toneladas (sólo hay uno así en el club Yacht, pero de menor capacidad) y ya arrancó con las obras para levantar la nave para Day Cruisers, un servicio que no existe en el mercado náutico regional que permite guardar en galpón cerrado en camas embarcaciones de hasta 30 pies que habitualmente quedan en el agua; cuando hay.

2) Ya que arrancamos por esa zona, con el comienzo de la construcción de condominios adonde estuvo el boliche Rumah (Colombres al 1.600) por parte de la constructora H3 se consolida en la costanera de Alberdi la misma tendencia de negocios que avanza en Fisherton: levantar complejos de viviendas en lo que eran grandes y refinadas casas particulares. En ambas zonas (de las más lindas de la ciudad) la situación es similar: los propietarios de los caserones (en este caso con una impresionante vista al río al estar sobre la barranca) no encuentran compradores ya que quienes tienen poder adquisitivo para adquirirlos prefieren los barrios cerrados por seguridad. Y  como cada vez es más caro su mantenimiento, aparecen nuevos tipos de desarrolladores inmobiliarios con el plan de asociarlos a los dueños para lotear esos terrenos en condominios con una fórmula comercial que está atrayendo inversores en real state ya posicionados en departamentos y que están a la búsqueda de nuevas opciones. Pero que además está despertando el interés de los usuarios finales. Y es que los condominios le permiten a segmentos medios acomodados acceder poder irse a vivir a muy lindas zonas de la ciudad antes inaccesibles. Por avenida Colombres ya hay sobre la barranca 3 grandes condominios ocupados, uno en construcción, y otro en comercialización previa al arranque de obras. Y atención que uno de estos nuevos desarrolladores que surgieron para este tipo de negocios sobrevuela una de las casas más llamativas frente a la Florida que no hace mucho puso el cartelito de venta.

3) Rotunda vuelta del mapa de la ciudad. Vamos a zona sur. Frente al casino. La novedad es que la familia Molinaro, propietaria del hotel a medio construir frente al City Center, inició gestiones para intentar terminar la obra. Un proyecto de hotel que incluso se empezó a proyectar en paralelo a la construcción del casino. Los dueños aseguran que tiene un entendimiento con una reconocida cadena hotelera para operarlo pero necesitan financiamiento para terminar las obras. Estuvieron reunidos con el Banco Nación, pero las conversaciones no vienen muy encaminadas. Ahora, el gobierno provincial está tratando de acercar a las partes para ver si se puede destrabar el tema y hay en agenda nuevos encuentros. ¿De cuánto plata estamos hablando? Se dice que necesitan 70 millones de pesos

4) Ya que hablamos de financiamiento, en el Ministerio de la Producción de Santa Fe no ocultan su satisfacción con que en los últimos 9 meses el Banco Nación aprobó 451 créditos para compra de equipos y construcción de infraestructura en empresas de toda la provincia por 9.183.784.920 pesos en el marco del acuerdo firmado con el gobierno provincial, que subsidió hasta 8 puntos de las tasa de interés de los préstamos. Al 7 de enero, de ese total de créditos aprobados, el Banco Nación desembolsó 4.041.009.996 pesos para 254 proyectos. “El número que hay que destacar es el de las solicitudes de créditos ya que se presentaron 536 proyectos por $10.622.041.359, números que muestran el interés de las empresas para invertir”, resalta el ministro, Daniel Costamagna. Es que en la cartera productiva se entusiasma viendo que en el último trimestre se aceleró el número de monetizaciones de los créditos por parte del Banco Nación. Por ejemplo, hay dos créditos próximos a monetizarse: Petit Fours en Carcarañá, tiene certificado por $ 100 millones subsidiados al 8% para la incorporación de maquinaria para el desarrollo de nuevos productos alimenticios. Y El Dorado SA (Inelro) en Salto Grande, la fábrica de electrodomésticos que tiene certificado por $ 85 millones subsidiados al 5% con el que comprarán equipos para automatizar el armado de gabinetes para sus heladeras.

5) Si hablamos de industria, esta semana fueron noticia el anuncio de la empresa Liliana de invertir $2.000 millones para aumentar en un 50% el espacio en su fábrica de electrodomésticos y sumar 350 operarios y la aprobación por unanimidad de los socios de Sancor de participar en el plan de un grupo empresario para rescatar a la láctea, que ya tiene el apoyo del gremio Atilra y del gobierno nacional y ahora van en busca del financiamiento. Pero también esta semana hubo un tema en la industria que está generando mucho “run run”, y no del bueno. Resulta que finalmente algunas empresas contratistas de obras civiles en Acindar (no todas) acordaron con la Uocra un aumento del 40% de las remuneraciones para sus afiliados que trabajen dentro del complejo siderúrgico. La idea es que los trabajadores de la construcción tenga sueldos equiparables a los que están dentro de la planta siderúrgica, como lo hicieron hace varios años con los que trabajan en las grandes aceiteras. Si bien Acindar no firmó entendimiento alguno ya que no tiene empleados de la Uocra, su planta fue el teatro de operaciones de la avanzada sindical ya que para presionar por el aumento el gremio de los obreros les bloqueó el complejo de Villa Constitución pese a que el reclamo era sobre las contratistas. Con el know how adquirido y el buen resultado de la avanzada que hizo antes en los complejos portuarios del Gran Rosario y ahora en Acindar, la pregunta en el sector industrial es: ¿a qué empresa le tocará ahora la avanzada de la Uocra? Y atención que hay muchas de las grandes fábricas con importantes proyectos de obras civiles en marcha ideales para que la Uocra les vaya a tocar el timbre.

6) Para cerrar, una de negocios gastronómicos. Esta semana la Municipalidad puso sobre la mesa una tanda de cuatro licitaciones (Silos Davis, Mercado del Centro, bar de estación de trenes Parque Urquiza y guardería en Costa Central). La estrategia es, aprovechando cierta mejora del negocio, poner buena cantidad de ofertas al ruedo para que los jugadores salgan a competir y se mueva el amperímetro. La próxima tanda, todavía sin fecha, será la de los tres bares del Parque España, cuya titularidad fue recuperada por la Municipalidad. Pero atención que hay más novedades. A la Municipalidad le quedó un proyecto sobre el tintero y en el que están trabajando ahora para terminar de darle forma: negocios gastronómicos en el Hipódromo. Aprovechando que tras la pandemia el espacio verde se revalorizó, esperan poder tener acomodado para el primer semestre del año una licitación, luego de sucesivos fracasos en las anteriores gestiones municipales.