Corredores y acopiadores manifestaron sus reparos a la propuesta de pago presentada por la defaulteada Vicentín, que establece una quita del 70% a pagar en 15 años, mientras que los bancos extranjeros se mostraron cautos.

Por un lado, el Centro de Corredores de Cereales de Rosario se pronunció en contra de aspectos centrales de la propuesta de pago de la deuda. Ayer los directivos de la malograda agroexportadora mantuvieron un encuentro virtual con los ejecutivos de la cámara empresaria rosarina para presentarle el detalle de la oferta que pusieron sobre la mesa a fines de la semana pasada.

“Es inaceptable porque carece de equidad. Y así se lo manifestó a la empresa desde el Centro, que también le hizo llegar el malestar que la propuesta causó en el sector”, le dijo el presidente de la entidad, Daniel Boglione, a Rosario3. “El sector productivo es el que termina afrontando el costo de la crisis de la empresa”, agregó el cerealista.

La falta de equidad a la que hace referencia Boglione es sobre la propuesta de Vicentín de concretar un pago inicial a todos los acreedores de 20 mil dólares, que a los más chicos le significaría cobrar toda su deuda (y obteniendo así su voto favorable en la convocatoria) pero que a los medianos y grandes no le representaría una cifra importante. Esa discriminación está prohibida legamente al no haber establecido categorías de acreedores.

Los ejecutivos de Vicentín también mantuvieron ayer una reunión virtual con la Sociedad Gremial de Acopiadores de Rosario para presentarles la propuesta.

En diálogo con Rosario3, su titular Javier Gastaudo, también mostró dudas sobre la categorización. “Esos 20 mil dólares de pago inicial no debe ser un número tirado al alzar. Claramente, parece destinado a ganar la voluntad de los acreedores chicos en la búsqueda de las mayoría necesaria para que les aprueben la quita del 70% al resto”, resaltó.

Más allá de la categorización, Gastaudo aprovechó la reunión para poner un tema sobre la mesa: “A mí no me gustó cómo plantearon la situación. Y se los dije. Ellos presentaron la propuesta como producto de la cooperación, el entendimiento y el esfuerzo de todos los involucrados. Dijeron que los acreedores harían el esfuerzo de afrontar la quita del 70%, y que los tres inversores estratégicos están haciendo el esfuerzo de invertir casi 600 millones, mientras que los accionistas están haciendo el esfuerzo enorme de quedarse al final de todo sólo con el 10% de su empresa. Pero para mí el único esfuerzo real lo están haciendo los acreedores, que van a cobrar el 30% en 15 años. Yo respeto y me parece perfecto que ACA, Molinos Agro y Viterra quieran hacer un negocio, no estoy en contra y está bien que aprovechen una oportunidad para comprar una empresa, pero ellos están haciendo un negocio, una inversión; no están haciendo un esfuerzo o jugándose una patriada; están invirtiendo para comprar a buen precio una empresa. Y por el lado de los accionistas, pasarán de tener una empresa con un patrimonio neto negativo a quedarse con el 10% de una empresa saneada. ¿Y el esfuerzo? Que no la vendan como un esfuerzo compartido”, se quejó el dirigente acopiador.

En ese marco, Gastaudo  propuso que “si realmente los accionistas quieren hacer un esfuerzo, le pasen el 10% de la empresa a los acreedores para financiar una mejora en la propuesta de pago de un default del que los acreedores no son culpables”.  

La posición del Centro de Corredores y de la Sociedad Gremial de Acopiadores expresa el sentimiento generalizado entre acopios, productores y corredores con la fuerte quita que propone la aceitera para hacer frente a su deuda por 1.500 millones de dólares.

En líneas generales, la única mejora importante (y así lo reconocieron desde ambas entidades) es que dolariza las deudas comerciales de la agroexportadora, que habían sido pesificadas a $60 durante la convocatoria. Pero la quita y el plazo de pago diliuyen la mejora.

Bancos piden por los fazones

En la reunión con los acopiadores, un directivo de la Sociedad Gremial le preguntó a los directores de Vicentín cómo había sido la respuesta de los bancos extranjeros, que, como grupo, son los principales acreedores (500 millones de dólares). ¿Fría o caliente?. No está fría, pero no tan caliente como necesitamos, fue la respuesta.

Precisamente, los bancos prefieren ir paso a paso, según contaron fuentes habilitadas. Si bien la aceitera les presentó los lineamientos generales, están a la espera de la letra chica para pronunciarse. Por lo pronto, le están pidiendo a Vicentín que cumpla el compromiso tomado de cerrar ahora los contratos de fazones para el año próximo generando así certidumbre de que las plantas seguirán operando y generando ingresos.

Los bancos dicen estar a la espera de que la empresa cumpla con el requerimiento del Juez del Concurso para ejecutar los correspondientes acuerdos de fasón para asegurar las operaciones del a empresa durante 2022. Y el comité recuerda que siempre manifestó su plena disponibilidad para llevar a cabo un diálogo honesto y constructivo con todas las partes implicadas e interesadas, con la plena intención de alcanzar una solución definitiva y justa.