Gracias a una excepción que abrió la Liga francesa, el crack rosarino Lionel Messi portará el número 30 en el París Saint-Germain (PSG) -dorsal destinado a los arqueros- y no el 10, declinado por el argentino a pesar de que el brasileño Neymar se lo brindó.

A falta de la comunicación oficial del PSG, que era inminente, Messi escogió el 30 por ser el número con el que jugó en sus dos primeras temporadas en el Barcelona, club en el que pasó 17 temporadas, y ya posó con esa camiseta en el estadio Parque de los Príncipes.

Messi logró conseguir ese número después de que el PSG solicitase una derogación de las normas de la Liga francesa, pues el 30 estaba solo destinado para los guardametas.

De hecho, el nuevo club de la Pulga ya ofrece en su tienda oficial la nueva casaca con el citado número y el apellido del capitán de la selección argentina.

Temprano, el argentino llegó a la capital francesa con una remera blanca con la leyenda "Ici c'est París" (Acá es París) y saludó tímidamente desde lejos a los hinchas presentes en la zona cercana al estadio, que lo esperaron durante más de cinco horas.

"Messi, Messi, Messi", se sintió durante varios minutos tras observar la legada del auto a las instalaciones.

Sin embargo, rápidamente, en una caravana similar, lo metieron en una camioneta y se movió al lujoso hotel Royal Monceua, a metros de la avenida Champs Elyseés y del Arco del Triunfo, una de las zonas más importantes y costosas de París, antes de asentarse en una casa de la zona céntrica con su mujer Antonela Rocuzzo y sus tres hijos, Mateo, Thiago y Ciro.

Hasta la cuenta de la NBA le dedicó este martes un post al nuevo equipo y nueva camiseta de Leo, recordando la que le mandó de regalo la estrella Stephen Curry.