Senegal volvió a derrotar a Egipto por penales, al igual que en la reciente final de la Copa África, y se clasificó al Mundial 2022 tras la definición mano a mano entre esas dos potencias del continente, donde Nigeria, un clásico rival de Argentina, se quedó afuera de Qatar.
El gol de Boulaye Dia en el minuto 3 que igualó de nuevo la eliminatoria (Egipto había ganado 1-0 como local) y los penales, con la atajada de Edouard Mendy a Mostafa Mohamed en el penúltimo lanzamiento y la transformación posterior de Sadio Mané, metieron a Senegal en su segundo Mundial consecutivo, por primera vez en la historia.
Al mismo tiempo, apartaron de Qatar 2022 a Mohamed Salah y a Egipto, que revivieron desde los 11 metros la tremenda frustración de la final de la Copa África hace menos de dos meses contra el mismo adversario.
No hubo revancha ni habrá Mundial para Egipto, que falló tres de sus cuatro tiros en la tanda decisiva, entre ellos el propio Salah. Ni siquiera fue capaz de aprovechar los errores también de Senegal, que tampoco marcó los dos primeros penales, pero que después se rehizo para anotar primero por medio de Ismaila Sarr, después a través de Dieng y finalmente de Mane, compañero de Salah en el Liverpool, con el definitivo 3-1. En el medio, Mendy repelió el lanzamiento de Mohamed.
Antes, no le había durado nada su ventaja de la ida a Egipto. En tres minutos, Senegal equilibró la eliminatoria para lanzar una final, como la que los enfrentó -y ganó ella- hace menos de dos meses en la Copa África disputada en Camerún.
No necesitó más para el 1-1 Boulaye Dia, que aprovechó una pelota parada para empatar la serie y proponer un nuevo encuentro, en casa, ante su público, para reencontrarse con esa destreza y para marcar su tanto más importante como internacional, informó EFE.
El segundo gol nada más en su recorrido de dieciséis encuentros con la selección del atacante del Villarreal, pero tan crucial para igualar el combate por Qatar 2022 ante Mohamed Salah y compañía, que sufrieron varios contratiempos aparte del gol en el primer tiempo, con dos cambios por lesión: primero, Rabia, antes de la media hora; después, Gaber, en el 36.
No alteró demasiado el panorama para el bloque de Carlos Queiroz, con un intento de remate en 45 minutos que no acertó al arco. Tampoco dispuso de mucho más en el segundo tiempo.
Siempre hizo más méritos ofensivos Senegal, tanto en ese momento como en la prórroga a la que derivó el duelo entre el 1-0 con el que terminaron los 90 minutos y empezó la nueva media hora, con oportunidades para la selección local, y el inmóvil 1-0.
Todo a los penales, igual que la Copa África, que ganó Senegal entonces. Como ahora. El campeón de África irá al Mundial de Qatar. Egipto, no. Ni Mohamed Salah.
Nigeria también afuera
Por su parte, Nigeria, un rival ya clásico de Argentina en los mundiales, no estará este año en la cita máxima al perder la eliminatoria ante Ghana, selección que tras perderse Rusia 2018, volverá a una fase final (la cuarta de su historia), gracias a un empate a un tanto en Abuja.
Las Superáguilas verdes, que perseguían su cuarta participación consecutiva, no tuvieron ni el acierto ni la precisión para culminar su remontada ante la desesperación de su hinchada, que llenó el estadio Nacional.
Tras el 0-0 de la ida, resultó definitivo un tanto a los veinte minutos de Thomas Partey. El exjugador del Atlético de Madrid, ahora en el Arsenal, enganchó un disparo sin mucha colocación ni potencia que se coló por debajo del meta Francis Uzoho, que falló de forma estrepitosa.
El cuadro local que dirige Augustine Eguavoen reaccionó. Rápidamente igualó con un penal transformado por William Troost-Ekong. Incluso marcó otro tanto antes del descanso, pero el VAR anuló la conquista de Victor Osimhen.
