En un acto breve desde la capital santafesina, el gobernador Omar Perotti tomó juramento al nuevo ministro de Seguridad, Rubén Rimoldi quien asumió en medio de críticas de la oposición por su pasado policial. La ceremonia, de pocos invitados, cerró con un pedido especial del gobernador a la prensa: no buscar respuestas sobre la inseguridad en declaraciones, sino dejar que el nuevo ministro hable con hechos.

Perotti tomó juramento a Rimoldi este miércoles pasadas las 9.30 en la Casa Gris, tras desplazar este martes por la noche a Jorge Lagna y a Emilce Chimenti de la jefatura de policía provincial. En su corto discurso, el gobernador dispensó palabras de agradecimiento para ambos pero habló de una "nueva etapa, de mucho trabajo y pocas palabras".

Misma idea reiteró durante la conferencia de prensa, también muy breve, en la le pidió a los periodistas que busquen respuestas en las acciones que lleve adelante Rimoldi. 

"Hay una etapa cerrada", dijo Perotti sobre la gestión de Lagna y Chimenti concluida este martes por la noche, a raíz de "una sucesión de hechos y análisis" que mostraron un "agotamiento". 

"No nos tiembla la mano a la hora de hacer cambios, siempre lo que buscamos es mejorar y buscar las mejores respuestas y avanzar", aseguró. Con todo, rescató que no duda que los funcionarios salientes hayan "puesto lo mejor de sí". 

"Pero necesitamos iniciar una nueva etapa, trabajando juntos –advirtió–. Una etapa de mucho equipamiento y tecnología para construir la seguridad que necesitamos. Y los necesitamos a todos, a cada uno de los integrantes de la institución policial, a cada uno de los representantes de las distintas fuerzas políticas, a las integrantes de la Justicia federal, necesitamos plenamente el apoyo federal".

Y subrayó: "No pueden dejarnos solos a los santafesinos, necesitamos el pleno y total acompañamiento de las fuerzas federales y de la Justicia". 

Rimoldi es un policía retirado desde el año 2008, crítico de las reformas que se aplicaron a la fuerza provincial desde aquel año.

Fue el ministro de Gestión Pública de la provincia, Marcos Corach, quien este martes por la noche confirmó los cambios desde la sede rosarina de Gobernación. Rimoldi trabajaba hasta ahora bajo la órbita de Corach, en el área de asesoramiento de seguridad a municipios y comunas.

La oposición, por su parte, no tardó en expresar reparos y algunas fuertes críticas también, por el pasado policial de Rimoldi ya que consideran que puede ser un retroceso democrático.

No obstante, desde el gobierno provincial defendieron la designación del nuevo ministro justamente por su conocimiento de la fuerza y también por sus críticas ya que hace 14 años que está fuera de la institución.

Desde el socialismo, también plantearon incertidumbre por el rumbo de las políticas en seguridad que tiene a Rosario con una cantidad de homicidios casi tan alta como las de los picos de 2013-2014.