La Unión Tranviarios Automotor (UTA) dispuso este jueves un paro nacional de choferes de colectivos de corta y media distancia para el viernes, en reclamo de mejoras salariales, pero el Ministerio de Trabajo de la Nación aplicó una rápida conciliación obligatoria por cinco días, por lo que la medida quedó suspendida y se reanudarán las negociaciones entre las partes.

De acuerdo con la medida del gobierno, la cartera que conduce Raquel "Kelly" Olmos dispuso "dar por iniciado un período de conciliación obligatoria por el término de cinco (5) días hábiles (...) debiendo retrotraerse la situación a la existente con anterioridad al inicio del conflicto y por el plazo de duración del presente procedimiento conciliatorio".

Ante ello, desde la UTA emitieron un nuevo comunicado donde avisan que "la entidad sindical acatará" la medida, "pese lo cual no dará un paso atrás en la búsqueda de un salario digno para las trabajadoras y trabajadores del transporte de pasajeros".

"Asistiremos a la audiencia el próximo martes 23 de mayo, y esperaremos que todos los responsables del Transporte acerquen las soluciones que la problemática necesita", exige el gremio, a través de su Consejo Directivo Nacional.

Más temprano, la UTA, que conduce Roberto Fernández, anunció en un comunicado que dispuso un plan de lucha "en la búsqueda de la mejora de nuestros salarios".

El gremio sostuvo que "las empresas niegan la posibilidad de aumento salarial, tanto en el AMBA (Área Metropolitana Buenos Aires) como en el interior del país".

La medida de fuerza estaba, señañaron, "empujada por quienes tienen la responsabilidad de solucionar la grave crisis en la que están poniendo al transporte, por todos los efectos 'dañosos' que causan, afectando a los 10 millones de usuarios diarios del AMBA y 9 millones en el interior del país, poniendo seriamente en riesgo la seguridad pública", alertó el gremio.

En ese sentido, la UTA advirtió que "será la exclusiva responsabilidad del sector empresario, de las máximas autoridades del Ministerio de Transporte de la Nación, de los responsables del transporte en las provincias y el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por la falta del acuerdo salarial".

"La posición es clara, los salarios de los trabajadores requieren un aumento urgente", enfatizó el sindicato.