Dicen que las camisetas de Newell's y Central son como el agua y el aceite, que nunca se pueden juntar. Hasta hoy. Porque Diego Armando Maradona fue tan grande, que su partida física logró que hinchas con casacas canallas entraran al Coloso Marcelo Bielsa para mezclarse con los leprosos que le rendían homenaje al Diez al pie de ese mural que ya se convirtió en un altar de veneración.

“Ella es muy hincha de Central, yo fanático de Newell's, pero a la hora de difrutar del fútbol, Diego nos unió a todos, nos representó a todos. Es el jugador que nos hizo sentir orgullosos de ser argentinos”, contó en De 12 a 14 (El Tres) el muchacho leproso, que acompañó a su esposa canalla al Parque Independencia.

Sobre la composición de la familia, describió que “la nena más grande de mi señora y mi señora son de Central; el más grande mio, el más chiquito mio, el hijo de mi señora y yo, somos de Newell's”.



Luego le tocó el turno de hablar a ella, quien confió: “Nunca me imaginé entrar así a la cancha de Newell's, no creo que esté mal tampoco. Pero esto solo lo puede lograr Diego”.

“Hoy estamos todos de luto”, reflejó la joven.



“Hay que ser realistas, hoy estamos para despedir a un grande del fútbol más allá de los colores de un cuadro. Y hay que hacerlo con mucho respeto”, cerró la hincha de Central, mientras se ganaba el aplauso de los hinchas de Newell's que estaban en ese momento en el Coloso.

También xeneizes y millonario

En el Coloso no solo hubo hinchas de Newell's y Central mezclados, también se acercaron hinchas de Boca y de River que viven en Rosario y que quisieron rendirle homenaje a Diego Maradona en el altar que se armó en el estadio del Parque Independencia.