El expresidente Mauricio Macri se negó a declarar este miércoles pero presentó un escrito en la causa en la que se lo investiga por supuesto espionaje ilegal a los familiares de los tripulantes del submarino ARA San Juan.

"No lo quiero demorar, usted está apurado por procesarme", le dijo Macri al juez federal interino de Dolores, Martín Bava, cuando el magistrado le preguntó si iba a hacer uso de la palabra y si estaba dispuesto a responder preguntas del tribunal y de la fiscalía, según pudo reconstruir Télam.

Macri llegó en auto sin hacer declaraciones ante los periodistas (incluso tiró un micrófono al piso) y la audiencia fue más fluida que la anterior, cuando no funcionó el sistema de red de computadoras.

El expresidente volvió a escuchar la imputación en su contra y, luego, le leyeron el decreto a través del cual se le levantó el deber de confidencialidad que su defensa consideraba indispensable para poder afrontar la indagatoria.

Terminado la lectura, el juez le preguntó al expresidente si iba a declarar, a lo que Macri se negó para dar paso a la presentación del escrito por parte de su abogado.


El magistrado, de todas formas, le ofreció al imputado leer el escrito pero el exmandatario rechazó también esa alternativa con otro dardo hacia el juez: " No, no quiero demorarlo, a ver si no llega antes del 14 (de noviembre)", en relación a las elecciones legislativas. 

El propio Macri dijo esta semana en El Tres que era inocente pero que ya se sentía "procesado".

Tras la audiencia, que duró menos de una hora, el juez Bava quedó en condiciones de resolver la situación procesal de Macri.

El ex mandatario está acusado de haber promovido desde la presidencia de la Nación, las maniobras de supuesto espionaje ilegal que tuvieron por víctimas a los familiares de los tripulantes del submarino Ara San Juan.

Macri se presentó este mediodía en la sede del juzgado al que fue convocado por cuarta vez luego de que el jueves pasado la indagatoria se suspendiera sobre la marcha, por el planteo de su defensa de ser relevado del deber de confidencialidad.

Este hecho derivó en una segunda recusación presentada por el abogado del exmandatario, Pablo Lanusse, que el propio magistrado rechazó el lunes "in limine" tras señalar que no había ningún motivo para que prosperara su apartamiento del expediente.

La Justicia sospecha que el exmandatario se nutrió de informes elaborados por la AFI para poder conocer de antemano los reclamos que le harían los familiares de las víctimas y que algún organismo del Estado pudo haber utilizado la información para saber con quienes se vinculaban.

En la causa abierta a raíz de una denuncia de la interventora de la Agencia Federal de Inteligencia Cristina Caamaño están acusados además los exresponsables de la AFI en el macrismo Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.