Se confirmó el procesamiento de Amado Boudou por cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública en el caso Ciccone, según la decisión que tomó este jueves la Cámara Federal porteña. El vicepresidente quedó, por tanto, muy cerca del juicio oral y público por la compra de la imprenta a través del fondo The Old Fund cuando era ministro de Economía.

La resolución fue firmada por los camaristas Jorge Ballestero y Eduardo Freiler, que decidieron rechazar las alegaciones que presentaron las defensas. En este entramado, Boudou está imputado junto con José María Núñez Carmona y del abogado Alejandro Vandenbroele, que también fueron procesados en su momento por el juez federal Ariel Lijo.

El ex dueño de la calcográfica, Nicolás Ciccone, y su yerno Guillermo Reinwick fueron procesados porque le cedieron el 70 por ciento de las acciones de la compañía al entonces ministro de Economía a cambio del levantamiento de la quiebra de la empresa, la aprobación del plan de pagos de la Afip y la futura contratación de la imprenta por parte del Estado.

Boudou, Núñez Carmona, Vandenbroele, Ciccone y Reinwick fueron procesados por el delito de cohecho. El vicepresidente también fue procesado por negociaciones incompatibles con la función pública junto a Núñez Carmona, Vandenbroele y el funcionario de la Afip Rafael Resnick Brenner.

Para llegar a este punto, el juez Lijo analizó la evolución patrimonial de Boudou, Núñez Carmona y Vandenbroele en los últimos años, y quien apareció como presidente de The Old Fund muestra un crecimiento que lo ubica como un empleado de los otros dos imputados en el caso.

El magistrado asegura que la firma The Old Fund fue adquirida solo con la finalidad de cobrar los más de 7 millones de pesos que pagó Formosa por el asesoramiento para la renegociación de la deuda provincial. En la investigación se detallan decenas de llamados entre Vandenbroele, Nuñez Carmona y Boudou en los momentos clave de la operación de Formosa: cuando se depositó el cheque y cuando se extrajo el dinero de la cuenta.