Mal que le pese, Julio Cesar Durán será siempre recordado como el abuelo "amarrete" que se ligó un reproche de la presidenta Cristina Fernández en plena cadena nacional.

El hombre, el primero que impulsó un amparo judicial para pedir que le dejen comprar dólares, fue entrevistado por Roberto Caferra en Radio 2. "Me sorprendió", confesó, al ser consultado sobre lo que la mandataria nacional dijo sobre su persona este martes.

Contó que tiene dos nietos, de 5 y 7 años. "Son lo más grande que me pasó en la vida", se emocionó. "Soy muy buenos alumnos. El día patrio, uno salió abanderado y otro artista", contó. Pensó, entonces, en "hacerles un obsequio que no se olviden, pero simbólico". Entonces intentó comprar dólares y no pudo. Tampoco logró comprar otras monedas extranjeras. "Me parecio un avasallamiento", sostuvo.

El hombre negó haber realizado la presentación judicial para impulsar otros juicios contra la Afip, tal como lo acusó Cristina Fernández. Sostuvo que tiene 60 años y que en su presente ve "otras cosas". "Los derechos persionalisimos de todos están primero en la vida, segundo la libertad y tercero la dignidad", planteó.

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Julio Cesar Durán (Radio 2)