La creciente presencia militar de Estados Unidos en Haití para asistir a su población tras el devastador sismo de la semana pasada encendió la alarma de los países de la ALBA hasta el punto de que Bolivia anunció este miércoles que pedirá a la ONU que rechace la "ocupación militar" estadounidense.

El Gobierno de Barack Obama ha desplegado en Haití más de 12.000 militares y enviado varios buques de la Armada y la Guardia Costera, incluido un portaaviones, mientras que su Fuerza Aérea asumió el control del aeropuerto de Puerto Príncipe.

Esto ha provocado las suspicacias de algunos países dado el pasado intervencionista de Estados Unidos en la región, pero particularmente en los de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), que viven en continua confrontación con Washington.

Desde Argentina también Hebe de Bonafini, de la Asociación Madres de Plaza de Mayo, manifestó este miércoles su “repudio por el desembarco imperialista de Estados Unidos, cuya intención es militarizar y ocupar un país en ruinas”.

“Ya enviaron más de 13 mil soldados armados a Haití. Lo que hace falta es ayuda humanitaria, no militares para someter al país y tenerlo bajo su control”, expresó la organización en un comunicado firmado por Bonafini.

Evo, Chávez y Ortega

El primero en protestar fue el presidente nicaragüense, Daniel Ortega, quien el sábado criticó que Estados Unidos estaba "manipulando el drama" generado por el terremoto en Haití con el fin de instalar tropas en esa nación

"No tiene ninguna lógica que tropas norteamericanas estén desembarcando en Haití. Si lo que Haití está pidiendo es ayuda humanitaria, no tropas", manifestó Ortega, que instó a Obama a que retire los soldados, "porque al ocupar Haití está ocupando territorio latinoamericano y caribeño".

No tardó en hacerse eco de esta denuncia el gobernante venezolano, Hugo Chávez, para quien EE.UU. está enviando a la nación caribeña a "miles de soldados armados como para una guerra", lo cuales "están ocupando a Haití hechos los pendejos".

"Terrible es el imperio. (...) Ya se tomaron hasta el Palacio de Gobierno" de Puerto Príncipe y están "disparándole a los saqueadores", afirmó Chávez, que en las últimas semanas había acusado a Washington de preparar una agresión en contra de su país desde las islas de las Antillas Holandesas de Curazao y Aruba.

Por su parte, el presidente boliviano, Evo Morales, anunció este miércoles que su Gobierno pedirá a las Naciones Unidas una reunión de emergencia para "repudiar y rechazar la ocupación militar de Estados Unidos" en el país antillano.

"No es posible que Estados Unidos use una desgracia natural para invadir y ocupar militarmente Haití", criticó Morales, quien calificó de "inhumano, salvaje y oportunista" el despliegue de las fuerzas armadas estadounidenses.

El mandatario se preguntó "cuánta plata, cuántos alimentos o cuánta agua" se van a destinar para abastecer a los soldados estadounidenses en Haití y consideró que ese dinero "debería gastarse en los damnificados" por el sismo.

Uruguay y Francia

Desde Uruguay, el que será ministro de Defensa en el futuro Gobierno de José Mujica, el ex guerrillero tupamaro Luis Rosadilla, manifestó su "profunda preocupación" por el despliegue en Haití de militares de EE.UU., "un país con vocación casi genética de imperialismo y colonialismo".

"Si bien fue el Gobierno haitiano quien solicitó esa presencia para garantizar la operatividad del aeropuerto, esa presencia ya generó tiranteces con varias Fuerzas Armadas de otros que cooperan con la ONU en Haití desde hace tiempo y la situación no es fácil", dijo en una entrevista con EFE.

Francia protestó el lunes ante Washington por las dificultades que tuvo para que aterrizara un avión galo que transportaba un hospital móvil y pidió a la ONU que precisara el papel de EE.UU. en la ayuda humanitaria a Haití.

El control estadounidense del aeropuerto también llegó a causar incomodidad en sectores militares brasileños, pero el canciller Celso Amorim quitó hierro al asunto tras conversar el pasado viernes con la secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton.

La respuesta

EE.UU. ha rechazado estas críticas asegurando que las tropas que está enviando al país caribeño se ocuparán únicamente de escoltar las operaciones de distribución de alimentos, donde ha fallado la logística para repartir las ingentes ayudas llegadas de todo el mundo, y no de tareas de seguridad.

Además, afirmó en un comunicado conjunto con el Gobierno haitiano, en el que se subrayó el "respeto mutuo a la soberanía" de cada nación, que el presidente René Préval "valora como esenciales los esfuerzos" de EE.UU. en Haití y le pide "que asista, como sea necesario" a su país.