Antes de la visita del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, a la estación de Temperley para inaugurar nuevas formaciones, este domingo un tren chocó contra una locomotora y dejó como saldo al menos 40 heridos. “No creo en las casualidades”, dijo este lunes el ministro en conferencia de prensa. El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, también deslizó sospechas sobre un posible sabotaje.

"Yo no creo en las casualidades, estamos a 24 horas de un paro, es el tercer siniestro que me toca afrontar a mi”, lanzó Randazzo durante la rueda de prensa de esta mañana. Allí explicó lo ocurrido este domingo por la noche, cuando a horas de la puesta en funcionamiento de coches 0km y su visita a la estación, el tren 2277 de la línea roca colisionó contra la locomotora 921 que realizaba maniobras en la playa de vías de Temperley. El accidente provocó al menos 40 heridos.

Randazzo advirtió que se violaron dos señales en rojo, la primera de ellas en la propia estación, lo cual implica prohibición de circular, pese a lo cual la formación inició la marcha.

"El motorman nunca respondió los tres llamados del control de trenes, tanto él como el ayudante”, precisó el funcionario y aseguró: “Yo ya no creo en las casualidades, si no en las causalidades, los tres sucesos están asociados a los procesos electorales".

"Les quiero de decir a todos que no nos van a poder parar, hagan lo que hagan, este proceso de transformación no se va a detener", enfatizó. 

A poco de ocurrido el siniestro, el jefe de ministros, también había deslizado sospechas. 

Las causas del hecho ocurrido en la noche del domingo se encuentran siendo investigadas por la Justicia Federal en cabeza del fiscal Sergio Mola.