Todo por amor. Un chico de 15 años quiso recuperar a su ex novia de 14. Pero ella se negó y entonces la pasión se convirtió en locura. El joven sacó un arma y se la llevó secuestrada. Sus amigas, que estaban con ella festejando el inicio de las vacaciones, advirtieron a la policía. Tras una persecución, el amante no correspondido quedó rodeado y tomó una decisión trágica: se disparó dos tiros a la cabeza. Por suerte, el joven tampoco tuvo éxito con eso y sólo uno de los balazos le produjo una leve herida en el cuero cabelludo.

   

El hecho sucedió alrededor de las 16 de este viernes en la zona del Monumento a la Bandera donde un grupo de alumnas del Liceo Avellaneda festejaba el comienzo de las vacaciones. En ese momento, se acercó un joven de 15 años –Pablo– quien se dirigió directamente a Romina, una chica de 14 que se divertía junto con sus compañeras. Según el testimonio de las amigas de Romina, el chico la obligó a retomar el noviazgo que ella había interrumpido y al recibir la negativa, sacó su arma y forzó a Romina a retirarse con él.

 

La pareja partió rumbo al centro de la ciudad, mientras el grupo alarmado avisó a la policía. A la brevedad, efectivos de la seccional 3ª se aproximaron con su móvil por calle San Lorenzo –a contramano– y los interceptaron en la esquina de Maipú y San Lorenzo. Cuando el joven advirtió la presencia policial, empezó a correr y se disparó dos tiros en la cabeza. Sólo una de las balas le rozó el cuero cabelludo y los mismos agentes policiales lo trasladaron al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) para que recibiera atención médica. Recibió sólo heridas leves y ya recibió el alta. El arma de fuego, un revólver calibre 22, fue secuestrada por la policía.

 

La causa está en manos del Juzgado de Menores de la 2ª Nominación en turno.